PRD: DE LA IZQUIERDA AL GOLPISMO
El PRD ha roto el sueño igualitario de sus fundadores. Era el legítimo heredero de las luchas de trabajadores, estudiantes, campesinos, del cardenismo, el movimiento ferrocarrilero y el magisterio democrático.
En sus entrañas portaba la savia de los combatientes por la igualdad. Y en consecuencia, tenía la responsabilidad histórica de hacer realidad la utopía de la justicia social.
Pero en tan sólo veintiocho años, de 1989 a 2017, pulverizó su frase emblemática ¡Democracia ya. Patria para todos! y renunció a su ideología progresista para tejer redes corporativistas hechas para atrapar cargos públicos, organizar grupos de poder y enriquecer a sus dirigentes.
La actuación del PRD en la Asamblea Legislativa ejemplifica cómo las ambiciones pueden transformar a ciertos militantes de izquierda en mercenarios al servicio de los personeros de la desigualdad social y el autoritarismo.
Auspiciado por la administración capitalina, en la actual Legislatura el PRD, con la complicidad del PAN y el PRI, ha votado en contra de iniciativas favorables a la ciudadanía, como la ampliación presupuestaria a los programás básicos de beneficio social.
Y han sido cómplices del Jefe de Gobierno en el manejo arbitrario de los recursos públicos.
Pese a tan lastimosa conducta, no habían caído al extremo al que descendieron el pasado miércoles 2, cuando sin presentar prueba alguna, basados en rumores y supuestas omisiones del jefe delegacional de Tláhuac, optaron por iniciar el proceso para destituirlo de su cargo.
Por carecer de sustento legal y de investigaciones previas, la decisión representa un golpe de Estado en contra del delegado, toda vez que fue electo mediante el voto de los ciudadanos de Tláhuac.
Por lo menos hasta el 7 de junio de 2015, Rigoberto Salgado gozaba de amplio respaldo social, como se comprueba al recordar que ese día consiguió el más elevado porcentaje de votación respecto de los compañeros de Morena que también vencieron en la disputa por jefaturas delegacionales en la Ciudad de México.
Y conste que algunos hicieron papilla a sus adversarios de otros partidos, sobre todo del PRD.
En todo caso, Salgado se ha puesto a disposición de las autoridades correspondientes. Que se le investigue. Entretanto, no renunciará a su cargo como solicitan los emisarios de Mancera en la Asamblea. Porque para ellos, la presunción de inocencia es letra muerta.