¿Cuánto cuesta tener cáncer de mama?
No sólo se trata de un tema de salud, la economía también entra en juego ante esta enfermedad
Mucho se ha luchado y los esfuerzos tanto del sector público como del privado se realizan día con día, sin embargo, aún falta mucho por hacer. Tanto en el ámbito cultural (romper con tabués y el machismo), como en cuestiones de inversión pública.
El costo de padecer cáncer de mama no sólo es económico, como todas las enfermedades, impacta en la situación emocional de la persona enferma y en la de toda su familia. Asimismo, la autoestima y el ánimo de quien lo padece se ve muy afectado, dado que los senos tienen una representación cultural, psicológica y sexual muy fuerte.
El Dr. Gerardo Castorena, cirujano oncólogo especialista en cáncer de mama señala que cuando esta enfermedad se presenta, no afecta sólo a una mujer sino a una familia y a la sociedad entera.
En el sentido económico también representa un golpe duro para la estabilidad familiar. Estos son algunos números, de acuerdo a Bienestar y Patrimonio Seguro:
Mastografía (una vez identificado el bulto o protuberancia): $1,800 - $2,000 pesos.
Resonancia magnética (identificar dimensiones del tumor): $ 6,600 pesos.
Ultrasonido mamario (identificar si es sólido o lleno de líquido): $3,500 pesos.
Biopsia (muestra de tejido): 4 mil pesos - 15 mil pesos dependiendo de la institución médica.
Cirugía: alrededor de 150 mil pesos.
Tratamiento post operatorio – Paquete de 20 sesiones de quimioterapia 350 mil pesos / 20 sesiones de radiación: 35 mil pesos.
Medicamentos por un periodo de entre 3 a 5 años: $2,000 - $5,000 pesos mensuales.
Sin contar las terapias psicológicas, medicina alternativa (muchas mujeres acuden a ella), prótesis y reconstrucción de pezones y areolas, etcétera.
Estos costos son para el sector privado. Se supone que para los afiliados y derechohabientes de los servicios de IMSS, ISSSTE, Seguro Popular, todo está cubierto.
Definitivamente la prevención y detección oportuna podrían no sólo ahorrarnos mucho dinero, sino también mucho dolor, angustia y un largo camino lleno de doctores y procesos.
Además de la autoexploración, la visita anual al ginecólogo, adecuadamente preparado, es básica. Así como la mastografía cuando llegamos a los 40 años. Otras acciones para reducir el riesgo de cualquier tipo de cáncer son mantener un peso adecuado, buena alimentación, ejercicio regular y disminuir el consumo de alcohol y tabaco.