AULAS PARA ALUMNOS AFECTADOS POR EL 19S GENERAN DISPUTA EN CDMX
El DIF de la CDMX apoya con programas sociales a dos niñas que quedaron sin su padre y madre
El sismo del 19 de septiembre que cimbró la Ciudad de México no sólo colapsó decenas de edificios, también sacudió a varias familias que tendrán que ser reconstruidas.
El Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIFCDMX) ha ubicado a dos niñas de 11 años que quedaron en situación de orfandad, además de otros 45 que perdieron a su padre o madre.
Asimismo, dijo a Publimetro el director del DIF capitalino Gamaliel Martínez, detectaron a 194 niños, niñas y adolescentes con 156 padres y madres que conforman 135 familias que perdieron su hogar por el sismo del 19 de septiembre.
A todos ellos el DIF-CDMX, mediante la estrategia Reconstruyendo familias, apoya a madres, padres e hijos con ayuda para alimentos, educación, becas y de atención médica, psicológica y recreativa.
Martínez Pacheco indicó que en total, fueron 30 padres y madres los que perdieron la vida el 19 de septiembre, de los cuales 17 fueron sólo en
la delegación Cuauhtémoc, de las que a su vez 11 son del edificio que colapsó en Álvaro Obregón 286.
Sobrevive con su bebé
Juana, a quien se le llamará así para preservar su identidad, perdió a su esposo -con el que contrajo matrimonio en 2015- en el sismo del 19 de septiembre, quedándose ella al cuidado del hijo de ambos, de 10 meses de edad.
El edificio donde vivían,
en la delegación Coyoacán colapsó por el sismo, sin embargo, ella y su hijo pudieron ser rescatados horas después, pero no así su esposo.
Tanto Juana como su bebé fueron llevados al hospital, de donde se les dio de alta el 20 de septiembre gracias a que afortunadamente no presentaron lesiones de gravedad.
Al perder sus pertenencias, el departamento donde vivían -el cual era prestado- y debido a que su esposo era el principal sostén de la casa, Juana se fue a vivir con una de sus dos hermanas a la delegación Álvaro Obregón.
Perdió a su madre en el Rébsamen
Ana María, de quien también se resguarda su identidad real, perdió la vida en el colegio Enrique Rébsamen, uno de los 38 inmuebles que colapsaron y donde trabajaba en el servicio de limpieza.
Ella dejó sola a su hija de 11 años de edad, quien estará bajo la tutela de su abuelo materno, un carpintero de 62 años de escasos recursos. La tía abuela de la niña apoyará en el cuidado de la menor.