Toyota C-HR: SUV millennial
Personalmente tenía muchísimas ganas de probar este vehículo, afortunadamente lo pude hacer y me gustó, pero quizá a usted le quede ajustado Personalidad radical
El diseño, básicamente es una de sus cartas fuertes. Si a usted le gusta que lo volteen a ver y le hagan comentarios referentes a su auto, C-HR es ideal. Su agresivo frente y estampa trasera son imposibles de pasar desapercibidos. A un hombre como yo, soltero y sin hijos, este tipo de automotor nos vendría muy bien este ejemplar. La parrilla superior es esbelta y fluye desde el emblema de Toyota a los costados de los grupos ópticos, porta rines de 17 pulgadas. A su vez, estos envuelven completamente hacia los laterales. Los faros incorporan iluminación de halógeno que se complementan con luces diurnas LED. Mientras que la tridimensionalidad de la carrocería luce un volumen que es apreciado, aunque quizá para otros pudiera ser #toomuch.
Al interior encontraremos asientos interiores tipo baquet que, dan un gran toque estético a pesar de no ser tan cómodos para viajes largos. Asimismo, un patrón de diamantes se replica en el cielo del auto y en los acabados interiores. Hablando de materiales, plásticos de buena factura son encontrados. Mientras que los controles y comandos están a la mano.
Mecánica
Disponible en una sola versión, este Toyota cuenta con un motor 2.0 litros a gasolina con inyección directa. Combinación que libera 148 caballos y 142 libras pie de torque. El cual realmente se siente brioso, pese a contar con una transmisión CVT –con modo manual– y cambios simulados hasta de 7 relaciones, misma que está más orientada al consumo. Dato sobresaliente en este ejemplar que fácilmente nos brindó 14.3 km/litro en rendimiento combinado. C-HR no sufre al acelerar de manera progresiva, sí un tanto en recuperaciones y aceleración desde cero con el pedal a fondo.
Seguridad
Me fascinó la combinación de asistencias, que incorpora: control de estabilidad, control de tracción y asistente de pendientes. Además del sistema de frenos ABS con distribución electrónica de frenado y asistencia de frenado. El freno de aparcamiento es electrónico por botón. Finalmente, en ambos ejes la suspensión es independiente y cuenta con discos en las 4 ruedas, la tracción es delantera. Posee también 7 bolsas de aire.
Conducción
El vehículo responde a las necesidades urbanas con total calidad gracias a una nueva arquitectura de la marca hace lujo de su gran desarrollo en este producto. Construido en la nueva plataforma TNGA de la firma. Este crossover compacto está desarrollado para soportar cualquier tipo de camino citadino y algunos fuera de terreno. Su gran altura y diseño, colaboran para que la solidez de marcha sea magnífica. Chasís y carrocería se complementan muy bien en la ciudad, no obstante el andar en carretera no será problema. Al exceder los 150 km/h el vehículo se siente sólido y el motor empuja con soltura.
El precio del diseño
Si bien de la vista nace el amor y Toyota C-HR es prueba contundente, tenga en cuenta que la cajuela es sumamente reducida. Más para nuestro mercado, en donde se incluyó una llanta de refacción de la misma medida que las restantes, bien por la intención, pero que limita la capacidad de carga.
Veredicto
Personalmente amé el nuevo Toyota C-HR, pues mis compras jamás han obedecido a la razón. Se ofrece en una sola versión en donde no existe cámara de visión trasera y faros de xenón, sí LED diurnos. Su precio es de 359 mil 900 pesos. Disponible en 7 colores de pintura diferentes.