SIGUEN SIN CASTIGO MILES DE CASOS DE ABUSO SEXUAL COMETIDOS POR RELIGIOSOS CATÓLICOS
Publimetro muestra cómo, a pesar de las denuncias que causan indignación, hay poco avance en calidad de justicia
Hay registros, en al menos 12 países, de 100 mil abusados desde hace décadas. Ésta es la cifra estimada que la organización Ending Clergy Abuse (ECA) recopiló en su investigación sobre abusos por parte de clérigos en la Iglesia católica, una cantidad abrumadora, si se toma en cuenta que sólo una docena de países recopilan datos. Se conoce que desde 1963, El Vaticano sabe de los abusos que fueron encubiertos en miles de diócesis alrededor del mundo. Aún así, los casos siguen subiendo.
El papa Francisco tuvo que pedir perdón y reconocer que no se actuó a tiempo, pero dentro de la misma institución los clérigos no han sido penalizados, ni procesados a través de las autoridades civiles, como pasó con el ex arzobispo de Washington, Theodore McCarrick, y siete obispos chilenos, quienes sólo renunciaron.
“La Iglesia católica es una institución jerárquica que se ha mantenido por siglos bajo el silencio de sus actos, situación que fue creando una cultura donde las complicidades y las faltas encubiertas fueron generando un deterioro que, hasta la fecha, la ha colocado en una de las crisis más profundas de su historia”, explicó a Publimetro el historiador chileno de la Iglesia católica Marcial Sánchez Gaete.
La Iglesia hizo un manual para representantes sobre cómo tratar con niños, pero eso es todo. “Las políticas
internas de la Iglesia católica siguen manteniendo las investigaciones contra sus obispos y padres en reserva dentro de la institución y no son compartidas con las autoridades. Esto permite a los religiosos mantener las cosas en secreto”, advirtió David Greenwood, de la Asociación de Abogados de Abuso Infantil en Inglaterra, quien trabaja en casos de abuso sexual en congregaciones.
Mientras se busca justicia, hay grupos de apoyo que trabajan más casos. “La esperanza de justicia no debe perderse, pero está muy claro que durante mucho tiempo la Iglesia católica ha vivido un imaginario de perfección”, aseguró Marcial Sánchez.