El año más complicado... adiós al 2020
Durante los últimos diez meses de este año, nuestro país se vio severamente afectado por la llegada del coronavirus, y por lo mismo no es ocioso recordar el terrible manejo de las autoridades sobre esta situación que nos ha afectado en todos los sentidos. Desde los primeros días de marzo, cuando ya muchos países estaban en alerta y empezaban a tomar medidas sanitarias para proteger a la población, incluso algunas drásticas, como Estados Unidos anunciando el cierre de fronteras con Europa. La revisión en los aeropuertos, cuestionarios y cuarentenas obligatorias eran algunas de las medidas que en el mundo se comenzaron a adoptar. En nuestro país, nada de eso ocurrió y lo que hemos visto diariamente tanto en las mañaneras como en las conferencias de la Secretaría de Salud ha sido una verdadera burla para todos los mexicanos. Por un lado, nos enfrentamos a la irresponsabilidad de López Obrador, citando imágenes religiosas, negando la gravedad de la enfermedad, invitando a la gente a salir de sus casas, rechazando a toda costa el uso del tapabocas. Por otro lado, la negligencia criminal de López-gatell, que subido en un pequeño tabique de poder ha minado la salud de los mexicanos. Tan sólo la semana pasada, datos oficiales reportaban un millón 372 mil 243 casos confirmados y 121 mil 837 defunciones, mismas que – en su mayoría– pudieron ser evitadas con un buen manejo sobre la situación. La toma de decisiones correctas por parte de las autoridades hubiera puesto a nuestro país en otra circunstancia mucho menos lamentable de la que vivimos hoy. Sin embargo, y a pesar de que todo ha sido un caos en este gobierno, al menos en la Cancillería se activaron para hacer acuerdos que lograron que las primeras dosis de la vacuna estén en territorio nacional, desde la adhesión al mecanismo multilateral Covax –que impulsó la Organización Mundial de la Salud (OMS)– como las negociaciones con farmacéuticas como Pfizer, Cansinobio, Astrazeneca, entre otras. Lamentablemente, como este gobierno no tiene mucho de qué presumir, el miércoles pasado se montó un gran show en el recibimiento de 3 mil dosis de vacunas. No era un evento menor, pero tampoco el momento de “la foto” a pesar de que se tiene previsto que para el 31 de enero de 2021 se reciban 1.4 millones de vacunas. Tan sólo se vacunará a un sector mínimo de la población, pues según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) somos alrededor de 125 millones de mexicanos. Hacemos votos para que el gobierno de verdad se aleje de su ya conocida “politiquería” y centralice la vacuna, mucho menos que la convierta en su discurso de campaña para el 2021. Sin duda, 2020 es un año que nos ha marcado a todos, que nos deja para la reflexión tanto de qué queremos a nivel personal, pero también a nivel colectivo, es por eso que más allá de los colores partidistas, gustos personales e ideales, debemos recordar los valores que inspiran al pueblo mexicano frente a circunstancias adversas: la solidaridad, la generosidad, la empatía, la fortaleza y ponerlas en práctica mediante la unión de quienes deseamos un mejor futuro para nuestro país.