POLEMIZAN POR CREACIÓN DEL OBJETOR DE CONCIENCIA EN SERVICIOS MÉDICOS
Diputados aprueban que personal médico y sanitario se oponga a realizar procedimientos si contravienen sus principios morales o religiosos; expertos acusan vacíos en la legislación. La polémica está abierta
La figura del objetor de conciencia ya aparece dentro de la legislación sanitaria nacional.
El pasado 10 de octubre, el pleno de la Cámara de Diputados aprobó la modificación al artículo 10-Bis de la Ley General de Salud en donde se permite a médicos, enfermeras y profesionales de la salud excusarse en la realización o aplicación de programas, actividades, prácticas, tratamientos, métodos o investigaciones si se contraponen a sus principios de conciencia, morales o religiosos.
Sin embargo, esta aprobación causa polémica entre diversos grupos porque afirman que la ley es ambigua y condiciona los derechos de salud de terceros (como un aborto o la aplicación de una vacuna) a la voluntad e ideología del personal médico.
También permitiría a los médicos oponerse a la prescripción de anticonceptivos o a no realizar transfusiones sanguíneas, si es que el médico o enfermera considera que viola sus creencias religiosas o principios morales.
Las voces a favor
La diputada federal Norma Edith Martínez Guzmán, del Partido Encuentro Social, fue promotora de esta iniciativa desde 2015 y la cual finalmente fue aprobada por los legisladores federales con 313 votos a favor, 26 abstenciones y 105 votos en contra. El respaldo lo obtuvo de las fracciones del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido Acción Nacional (PAN).
La figura del objetor de conciencia se diseñó originalmente en temas militares y permitía a ciudadanos oponerse a una función castrense si iba en contra de sus principios éticos o religiosos. Sin embargo, la extensión se aplicó al marco médico y sa-
nitario.
La legisladora negó que su iniciativa tuviera el objetivo principal de combatir al aborto y derechos reproductivos de la mujeres y aseguró que grupos de izquierda han buscado “desinformar”.
Destacó que existe un candado para evitar abusos pues, según la modificación a la ley, “no podrá invocarse la objeción de conciencia cuando se ponga en riesgo la vida del paciente o se trate de una urgencia médica, en caso contrario se incurrirá en el causal de responsabilidad profesional”.
Afirmó que el sector salud deberá garantizar la presencia de personal médico, con posibilidad de realizar los procedimientos, en caso que un objetor se niegue.