Las niñas a la tecnología
Acercarlas ayudará a reducir la desigualdad de género
El 8 de marzo se celebrará el Día Internacional de la Mujer, coincidente con un marco histórico impensable hace algún tiempo atrás. Somos testigos de un gran avance hacia los derechos de la mujer y su integridad, con una marcada evolución en la lucha por una participación más equitativa en la sociedad.
Sin embargo, aún no están dadas las condiciones para que niños y niñas tengan las mismas oportunidades, resta bastante por hacer en esta materia. Continúan existiendo desigualdades de género estructurales que afectan las relaciones y decisiones de las personas desde la infancia.
En este marco, la tecnología tiene un lugar estratégico que, cuando es bien aprovechada, cuenta con el potencial para empoderar e incluir a niñas y mujeres, así como a otros sectores vulnerables de la población. En el mundo actual, cada vez más diverso, cambiante e interconectado, resulta crucial desarrollar competencias vinculadas con el pensamiento científico-tecnológico. Son conocimientos y habilidades que necesitamos para enfrentar los desafíos del presente y del futuro.
El escaso número de mujeres que se vinculan con carreras y profesiones relacionadas con estas disciplinas es foco de debate y una problemática a resolver para alcanzar las metas de los Objetivos del Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas (Agenda 2030).
Familias y educadores tenemos una oportunidad y responsabilidad única de acompañar esta transformación hacia un mundo con igualdad de género, sin prejuicios y con modelos de mujeres protagonistas en diversos ámbitos.
¿Cómo acercar a las chicas a la ciencia y la tecnología?
En un mundo cada vez más intervenido por los medios digitales, ¿qué necesitan las chicas (y los chicos) para crecer y desarrollar sus potencialidades? El concepto STEAM (por sus siglas en inglés: Ciencia, Tecnología, Ingeniería, Arte y Matemática), consiste en la articulación de estas disciplinas para estimular la creatividad, la capacidad de resolución de problemas y diversas habilidades indispensables para el pleno desarrollo.
¿Qué pueden hacer padres y madres para acompañar a sus hijas?
A pesar de los avances y cambios significativos en el rol de las mujeres en todas las esferas de la sociedad, todavía es escasa su participación en las áreas científico-tecnológicas. Son actividades que se asocian con habilidades masculinas, fenómeno alimentado por estereotipos, ideas arraigadas y sesgos de género que persisten hasta hoy.
La infancia es una etapa en la que comienzan a consolidarse las representaciones sociales, valoraciones, afinidades y actitudes. Casi no hay diferencias respecto de la relación de chicos y chicas con las disciplinas STEAM. Sin embargo, conforme van creciendo, las chicas pierden la confianza en su capacidad de desempeño en estas áreas.
Recientemente, la Cátedra Regional UNESCO Mujer Ciencia y Tecnología en América Latina FLACSO Argentina, con la Asociación Civil Chicos.net y el apoyo de Disney, realizó una investigación sobre cómo niños y niñas de 6 a 10 años se vinculan con la Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas, que evidencia el decreciente interés de las niñas por las Matemáticas a medida que avanzan en el trayecto escolar. Eso refuerza la brecha de género y disminuye las oportunidades laborales para las mujeres en el ámbito de la ciencia y tecnología. Por su parte, según esta investigación, casi el 50% de los padres en Buenos Aires cree que hay diferencias de desempeño entre niñas y niños en materias relacionadas con Ciencia y Tecnología. Entre ellos, la mayoría considera que los varones tienen mejor rendimiento en Tecnología e Informática que las mujeres.
¿Por dónde empezar?
Los adultos cumplimos un rol importante en este proceso. Podemos influir positivamente en esta construcción promoviendo actividades culturales, artísticas y de entretenimiento que les permitan acceder a contenidos científicos y tecnológicos y así eliminar las barreras que les impiden a las niñas el desarrollo completo de su potencial.
Percepción de unas y otros
El problema de género involucra tanto a las niñas como a los varones.
Indudablemente estamos transitando épocas de cambio, tanto desde la perspectiva de los niños y las niñas como de la mirada de los adultos. El paradigma binario de una cultura que indica “cómo son y deben ser” los hombres y las mujeres va dejando lugar a tendencias que anuncian más libertad de elección, autonomía e igualdad. Si bien estos movimientos se encuentran aún más en el plano discursivo que en la práctica, se vislumbran nuevas concepciones culturales que hablan del surgimiento de nuevas infancias y formas de ser padres y madres.
Nos encontramos en un terreno fértil para que niñas y niños puedan desarrollarse plenamente en un contexto más diverso, más libre e inclusivo en donde cualquier actividad, interés o profesión puede ser “para ellas y para ellos”.
“Todavía es escasa la participación de las mujeres en las áreas científico-tecnológicas”