BRIGADISTAS CONTROLAN INCENDIO EN LA PRIMAVERA
Autoridades afirman que fue poco el arbolado adulto que se perdió, pero será en cuanto se apaguen todos los focos de calor que se hará una evaluación completa de las afectaciones
Después de 43 horas de combate sin descanso, bomberos, brigadistas y soldados lograron controlar y sofocar el incendio que devastó más de dos mil 400 hectáreas del área natural protegida del bosque de La Primavera.
Autoridades estatales, encabezadas por el gobernador Aristóteles Sandoval, minimizaron los daños ambientales, a pesar de que el área siniestrada tiene gran cantidad de arbolado adulto.
“El incendio fue de manera superficial, lo que afecta más a pastizales y hojarasca (…) prácticamente el 95% de nuestro arbolado no tuvo afectación importante, si bien está estresado. La capacidad del encino para su regeneración es extraordinaria”, afirmó el gobernador Aristóteles Sandoval después de realizar un sobrevuelo por la zona y señalar que la mayor afectación a arbolado adulto está en los bordes del cerro de San Miguel.
A decir del mandatario, las autoridades realizarán trabajos de evaluación y al concluir se determinará cómo se llevará a cabo la reforestación.
Expertos y académicos de la Universidad de Guadalajara han sido críticos con la realización de reforestaciones inmediatas posteriores a los incendios en el bosque de La Primavera, pues señalan que no se da tiempo a un aspecto prioritario: la retención del suelo.
Investigadores como el profesor Miguel Magaña Virgen, del Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias, explican que al llegar el temporal de lluvias, los suelos están desprotegidos porque las raíces y vegetación que los retenían han desaparecido. El agua deslava el suelo a zonas bajas y se lleva los nutrientes que permitirían el crecimiento de otras plantas. Los esfuerzos de reforestación serían inútiles si antes no se salvaguarda el suelo.
A decir de autoridades, se investigará y se denunciará a los causantes del incendio. Según los primeros reportes, el siniestro se habría originado de una quema agrícola que se salió de control cerca del poblado de Cuxpala en Tala.