TURISMO, LUCES Y SOMBRAS
¿En qué se parecen México y Tailandia? Ahora que estamos en el verano y quienes no están buscando chapulinearle al Peje están de vacaciones; hay que recordar que ambos países son potencia mundial emergente en materia de turismo.
El turismo, pese a que Miguel Ángel Osorio Chong pasará a los libros de historia por su fracaso en seguridad pública, ha crecido consistentemente a lo largo de los años recientes prácticamente en casi cada indicador.
De hecho, es un rubro donde la administración Peña merece mayor atención. En la práctica, se puede decir que el secretario De la Madrid hizo su trabajo pese a Chong.
Para el año 2007, se calcula que llegaron a México 898 millones de turistas. Para 2016, la cifra se incrementó a mil 235 millones. Mejor aún, pese a que el paso de Meade por la Secretaría de Hacienda dejó como legado la devaluación más grave de las últimas décadas, la factura promedio en dólares ha crecido también consistentemente a lo largo de los años.
Seguro que hay explicaciones adicionales, pero recorrer este país deja una grata sensación de que la alianza entre empresa, gobierno, universidad y capital humano hace parecer que en algunas dimensiones, algo estamos haciendo bien.
Cierto que aún estamos lejos de la lista de los “cinco grandes” destinos para el turismo: Francia, España, Estados Unidos, Italia y China. Estos cinco países, en su conjunto, concentran cerca del 28% del total de turistas.
México ha tenido un incremento en el número de turistas, más de 35.1 millones en los números más recientes, cifra superior a su más cercano perseguidor, Tailandia, país que acumuló un total de 32.6 millones de visitas.
Los ingresos de la industria turística son cuantiosos. El total de ingresos a nivel mundial asciende a mil 220 billones de dólares. De esta cifra, los “cinco grandes” concentraron el 32.26% de los ingresos. Estados Unidos encabeza la lista con un total de 205.9 mil millones de dólares, seguido muy de lejos por España con 60.3 mil millones de dólares.
Aquí inician las malas noticias. Pese a que los turistas han gastado cada vez más, aún no ofrecemos, salvo excepciones notables, suficiente valor para que se atraiga turismo que gaste más, sin contar con que el mercado interno se ha visto seriamente debilitado.