Homicidios y robos, retos de AMLO a un año del triunfo
Desde la llegada al poder de Enrique Alfaro y Andrés Manuel López Obrador, prevalecen los choques políticos entre ambas figuras; pese a ello, lograron destrabar proyectos prioritarios para el estado, como la Línea 3 del Tren Ligero o la agenda de segurida
Este 1 de julio se cumple el aniversario de la victoria que obtuvo Andrés Manuel López Obrador para ocupar la Presidencia de la República; sin embargo, los resultados –hasta el momento– han sido contrastantes. Por un lado se ofrecen apoyos a más de 650 mil jóvenes para que puedan trabajar y, por otro, las cifras de homicidios –por ejemplo– se han duplicado en el periodo.
Desde la llegada al poder de Andrés Manuel López Obrador, su relación con el gobierno de Jalisco podría clasificarse como de amor y odio. La vinculación con el gobernador Enrique Alfaro ha sido ríspida en varios momentos y aunque la confrontación política se mantiene, se ha moderado lentamente para sacar adelante varios proyectos prioritarios, como fondear la conclusión de la Línea 3 del Tren Ligero y el macrolibramiento sur de Puerto Vallarta, que se habían quedado sin partidas en el presupuesto de egresos 2019.
Para las autoridades locales, pese a los discursos menos hostiles y más amigables, queda un aire de desconfianza por los recortes a programas sociales y en materia de salud que ahora son subsidiados por el estado y municipios. Tampoco hay certeza en la llegada y aplicación de recursos públicos como los correspondientes al ramo 23.
Desde que López Obrador realizó la gira de agradecimiento en septiembre del año pasado, matizó el discurso de confrontación que mantenía con Enrique Alfaro Ramírez, durante el periodo electoral: “No olviden ustedes que los municipios y los estados son libres y son soberanos, y tengo que ser respetuoso de las autoridades locales, nada de pleito, no vamos a confrontarnos”, manifestó López Obrador en esa fecha.
Sin embargo, la relación no mejoraba y Alfaro encabezó una ofensiva contra el nuevo presidente señalando tres aspectos: la violación del pacto federal al crear la figura de los superdelegados como un contrapeso a la soberanía de los estados; haber dejado fuera del presupuesto de egresos de 2019 los proyectos prioritarios para Jalisco como los fondos para la Línea 3, la Línea 4, la presa El Purgatorio y el libramiento sur de Puerto Vallarta y la gota que derramó el vaso fue la crisis de abasto de gasolina en Jalisco, por la que el gobernador acusó al presidente de politizar el desabasto y castigar particularmente al estado por no alinearse a las políticas federales.
El punto de quiebre ocurrió el 14 de febrero. El gobernador Enrique Alfaro visitó Palacio Nacional y tras este encuentro con el mandatario nacional, se habrían limado algunas as
“No representamos a partidos, somos gobernantes. Miren, partido, como su nombre lo indica es una parte, gobierno somos todos”
“¡Ya nada de pleito!, ¡vamos hacia adelante!, vamos a llevar a cabo entre todos la cuarta transformación de México” Andrés Manuel López Obrador, presidente de México
perezas. Las visitas posteriores a Jalisco del mandatario se caracterizaron por un mensaje más cordial.