NO DESCARTAN AUMENTOS EN LOS PRODUCTOS PARA EL HANAL PIXÁN
Por ahora se mantienen los precios de los insumos en las centrales de abasto, pero no se descartan aumentos
Dulce de cocoyol, papaya, ciricote, ciruela, yuca, hojas de plátano, velas, santos, mandarinas, jícamas, latas, atados de x’pelón y muchas flores enriquecen los pasillos de los mercados Lucas de Gálvez y San Benito.
¿El motivo? La llegada de Todos los Santos o Día de Muertos.
Una hojeada a ambas centrales de abastos indican que los precios de los elementos para quienes acostumbran poner altar o cocinar el tradicional pib se mantienen igual que el mes pasado, aunque algunos vendedores no descartan el incremento en algunos productos conforme se acerque noviembre, si la demanda es mucha o si hay escasez.
“Hace unos 10 ó 15 años nos iba mejor. Desde una semana antes empezaban nuestras ventas y todo noviembre era bueno, la gente compraba mucho dulce para sus muertitos y para los vivos también”, recuerda Martina Flores Canché, originaria de Kanasín y quien a diario acude al Lucas de Gálvez a vender dulces de temporada.
“Lo que se vende ahora es el dulce de papaya, de calabaza, ciruela, cocoyol y ciricote. También la yuca con miel o en dulce. No está caro marchante, $20 el platito y da hasta para que coman tres”, dijo sonriente la vendedora de dulces.
Doña Juana, quien vende a lado de aquélla, opina que la venta de este dulce yucateco bajó cuando llegaron los de otras regiones como las calaveras y otros que son tradicionales de otros estados, pero no de aquí.
“Para los días buenos, ponen su venta en las calles alrededor del mercado y nos perjudican porque la gente ya no llega a nosotros, que estamos adentro, o si llega ya compró”, dijo la marchante del Lucas de Gálvez.
A pesar de ello, ambas esperan estos días, pues tienen clientes habituales, principalmente gente adulta y visitantes, quienes no cambian un dulce de papaya o cirico-
“Hace unos 10 ó 15 años nos iba mejor. Desde una semana antes empezaban nuestras ventas y todo noviembre era bueno, la gente compraba mucho dulce para sus muertitos y para los vivos también”} Martina Flores, vendedora del
Lucas de Galvez
te por nada.
Por lo pronto, si usted ya decidió poner su altar y hacer comida de muertos, aquí están algunos precios que rigen ahora en los mercados Lucas de Gálvez y San Benito: manteca, $30 el litro; masa, entre $15 y $17 el kilogramo.
Tomate y cebolla, $15 el kilo de ambos; hoja, $10 la sabana; cilantro, $5 el rollo; x’pelón, $20 el rollo.
Los ingredientes esenciales, puerco o pollo, $75 el kilo del primero y $35 el del segundo; las mandarinas, $10 el montón, y la jícama, $20.
En cuestión de flores, la variedad es amplia y los costos varían de acuerdo con su estado, tipo, tamaño y cantidad que se lleve.
A fin de facilitar la compra, muchos vendedores de estos productos preparan ramos o arreglos y los ofrecen a dife- rentes precios, que van desde los $35 hasta los $500 o más.
El movimiento se inicia muy temprano en los mercados y algo que es de llamar la atención es el gran número de residentes extranjeros a quienes se ve comprando y preguntando.