Popotes de plástico, amenaza mortal para el planeta entero
Son consumidos por millones de personas cada día. Destinados a un solo uso, los popotes alimentan a la fauna y flora y la asfixian; se trata de un problema que afecta a todo el mundo, principalmente en el sector alimenticio
Tras el anuncio del grupo hotelero Hilton de que quiere eliminar los popotes de plástico de estos establecimientos para finales de 2018, McDonald’s está ahora comprometido con el medio ambiente. El gigante de la comida rápida decidió eliminar estos productos plásticos en todos sus establecimientos de Reino Unido, y lo hará en Bruselas y Namur a partir del próximo mes de septiembre. Una primicia para el grupo, que propondrá en su lugar popotes de cartón. Según Stephan De Brouwer, director gerente de McDonald’s Bélgica, esta medida se aplicará en una fase de prueba. Se elaboró tras conversaciones con la ministra de Medio Ambiente de Bruselas, Céline Fremault, que está trabajando actualmente en un texto destinado a eliminar los popotes de plástico de un solo uso.
Hacia la toma de conciencia política
Se trata de un problema que también parece preocupar al Reino Unido, donde cada año se tiran unos 8 mil 500 millones de popotes de plástico. El pasado mes de abril, el gobierno británico anunció su intención de prohibir estos objetos a finales de año, como parte de su plan para combatir los residuos de este material derivado del petróleo.
En Grecia, Sikinos, una isla de la Cíclada con menos de 300 habitantes, se prepara para pasar su primer verano sin popotes de plástico, una iniciativa medioambiental nunca antes vista en Grecia. Las autoridades locales y los empresarios de la isla se comprometieron a dejar de utilizar estos objetos contaminantes como parte de la campaña medioambiental de la Fundación Laskaridis.
Estos serán sustituidos por versiones biodegradables suministrados por esta fundación, de forma gratuita hasta finales de 2019. La campaña entrará en vigor el 1 de junio.
Peligro real para el medio ambiente
Destinados a un solo uso y una vida útil de veinte minutos, los popotes se consumen y se tiran a la basura. Más de 500 millones de ellos se usan todos los días sólo en Estados Unidos. Un informe de Ocean Conservancy de 2016 reveló que representaban el quinto residuo más común arrojado al mar. Se unen a los 700 kilogramos de residuos plásticos que terminan en los mares y océanos del mundo cada día y forman el ‘séptimo continente’ del plástico.
Sensibilización y alternativas
En 2015, un video que muestra a los oceanógrafos Nathan Robinson y Christine Figgener sacando un popote de la nariz de una tortuga sangrante en Costa Rica conmovió al mundo, al presenciar una triste realidad. En promedio, el plástico mata a más de un millón y medio de animales marinos.
Debido a su pequeño tamaño, los popotes son difíciles de reciclar y muchas ONG piden que se retire su uso, que dista mucho de ser necesario, ante este problema social. El pasado 3 de febrero, por iniciativa de las asociaciones francesas, nació en Francia un día internacional sin popote.
A través de estas iniciativas, las asociaciones esperan cambiar actitudes. Además del hecho de no pedir más popotes con sus bebidas, estas últimas recuerdan que también existen alternativas como los de bambú, vidrio, papel o acero inoxidable. Para ir aún más lejos, Loliware propone incluso imaginar popotes a partir de algas biodegradables y comestibles.