LA CONSULTA CIUDADANA EN LA QUE NADIE GANA
La comunicación del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, respecto a la consulta sobre el Nuevo Aeropuerto Internacional de México, ha sido errática, los voceros de su gobierno hacen malabares para intentar explicar lo que su jefe dice previamente. A unos días de la consulta, y a pesar de tener ya la pregunta que se realizará, sigue habiendo más dudas que respuestas.
Parece que el próximo gobierno hace un esfuerzo por asumir temas polémicos que no le corresponden aún, la decisión sobre el nuevo aeropuerto, que ya está en construcción, es una acción del gobierno actual, sin duda que habrá una afectación para el gobierno entrante; sin embargo, ellos tienen que tomar las decisiones y asumir las consecuencias. Lo que no debe hacer un gobierno es trasladar la responsabilidad de una decisión técnica a la ciudadanía y pedir a los medios que sean ellos los que realicen los foros de debate.
Espacios como el de Ciro Gómez Leyva, en Imagen y Radio Fórmula, atendieron el llamado del presidente electo para hacer foros con especialistas para ampliar la discusión sobre la consulta y que los ciudadanos tuvieran más información sobre el sentido de su decisión. Sin embargo, esa no es la responsabilidad de los medios, sino del gobierno, parece estéril el esfuerzo de un foro en un canal de televisión o estación de radio si al otro día parte del equipo de transición rechaza alguna de las opciones, es decir, Texcoco.
El ejercicio de gobierno implica tomar decisiones que no le gustarán a todos, la participación ciudadana es indispensable para fortalecer al propio gobierno, sin embargo, en temas absolutamente técnicos esa participación no sólo es innecesaria sino riesgosa, los ciudadanos sin conocimientos suficientes en algún tema en particular pueden cometer un grave error al tomar una decisión equivocada, es el gobierno quien debe asumir esa responsabilidad.