Mariana Azcárate, el poder para iniciar
NESPRESSO TALENTS ES UNA INICIATIVA QUE IMPULSA LA CARRERA DE JÓVENES CINEASTAS PROVENIENTES DE TODO EL MUNDO. EN LA EDICIÓN DE ESTE AÑO, EL PÚBLICO MEXICANO ELIGIÓ, DE ENTRE LOS TRABAJOS PRESENTADOS, LOS TRES MEJORES CORTOMETRAJES HECHOS POR CINEASTAS NA
el amor que Mariana siente por el arte data de hace mucho tiempo. Antes de incursionar en el cine, estudió canto y actuación para comedia musical, y también ballet (con Socorro Larrauri, quien interpreta el papel de la abuelita en Bicho). Durante su trayecto ha gozado del apoyo de su tía y de su madre. “Tener un apoyo es imprescindible, ya sea de un familiar o un amigo, siempre es importante contar con alguien que crea en ti”. Sus inicios en el oficio audiovisual fueron por completo autodidactas. Echando mano de tutoriales bajados de Internet, a través de un camino basado en la prueba y el error, comenzó a grabar videos que subió a su canal de Youtube. Posteriormente se decidió a tomar clases formales de cine, así que se inscribió a los cursos del director mexicano Luis Mandoki. Luego de cuatro años de estudio, Nespresso apareció en la vida de Mariana en forma de oportunidad. Lo único que debía hacer era grabar, en formato vertical, un cortometraje que durara aproximadamente tres minutos y que respondiera al tema “Tienes el poder para...” Su vida, marcada por nuevos inicios, la hizo completar la frase de la siguiente forma: “Tienes el poder para empezar de nuevo todos los días de tu vida”.
LA EXPERIENCIA NESPRESSO
La relación entre Mariana y Nespresso Talents empezó con el reto de renunciar a la costumbre de pensar la imagen cinematográfica de forma horizontal y recomponerla de manera vertical. Esto significó ver el mundo de otra forma, pues nuestro campo natural de visión (y de acción) se en- cuentra íntimamente relacionado con el movimiento que por lo común describen las personas y los objetos: de lado a lado. Ella pensó este cambio como ver a través de una rendija: echar un vistazo a algo íntimo, oculto a la simple vista. Bicho, su cortometraje, plantea una mirada más allá de los prejuicios, pues relata la historia de un niño que se interesa por una actividad tradicionalmente considerada para niñas, y la de una mujer de edad avanzada que se descubre capaz de empezar de nuevo. El guión fue escrito en una noche y se fue modificando a lo largo de los cinco días que duró la grabación. El trabajo a contrarreloj no impidió la creación de una pieza digna de reconocimiento que conquistó al público y a los jueces. Mariana atribuye ese éxito a la humanidad encerrada en el corto, “todos hemos sufrido rechazos como el que sufre Bicho”. Esta universalidad del tema de Bicho, aunada a una buena ejecución, la llevó a conquistar el Premio Internacional Nespresso Talents 2017 otorgado por el jurado, lo que le permitió asistir al Festival de Cine de Cannes en Francia, donde participó en los talleres de la Semana Internacional de la Crítica y del programa Berlinale Talents, derivando en una experiencia en extremo enriquecedora para ella.
CAMINO A MORELIA
El segundo lugar del Premio Nacional del Público Mexicano le dio a Mariana la oportunidad de presentar su corto en el Festival Internacional de Cine de Morelia que se celebrará en octubre. Pero el impulso de Nespresso Talents no se queda ahí. En los próximos meses elaborará un nuevo guión que será “tallereado” de la mano de un conjunto de profesionales
con el fin de que lo lean detenidamente. El objetivo es que, una vez en Morelia, Mariana haya trabajado y perfeccionado su texto apoyada por cada uno de los asesores. Además, contará con el apoyo de la directora, productora y conductora de televisión Ximena Urrutia, la actriz Claudia Ramírez y el director Rigoberto Perezcano, quienes echarán mano de su experiencia para analizar y dar solución a las problemáticas que el guión de Mariana plantea en aspectos como la producción, actuación y dirección. “Algo fundamental para hacer cine es conocer a quienes intervienen en el proceso de creación de las películas: directores, productores, actores, fotógrafos, guionistas, escenógrafos, etcétera”, explica Ximena. Es por ello que Nespresso busca vincular a los noveles cineastas mexicanos, como Mariana, con personas que conocen bien la industria cinematográfica nacional, que poseen una carrera consolidada, personas que alberguen la capacidad de transmitir de manera eficaz sus conocimientos a las nuevas generaciones. La actriz Claudia Ramírez vive su participación en este proyecto mediante un entusiasmo muy particular, pues reúne dos de sus grandes pasiones: el cine y el café. Considera muy positivo que una empresa como Nespresso vuelque sus esfuerzos hacia el cine, “cualquier evento a favor de la cultura es importante, pues se trata de un sector que, junto con la educación, no goza del apoyo que debería tener”. Su opinión es que más empresas deberían hacerlo, “porque al impulsar a nuevos escritores, actores, directores y creativos en general, todos los que participamos en el mundo del cine resultamos beneficiados, en tanto se plantean nuevas formas de contar las cosas”. Y considera que un acierto de Nespresso Talents es el formato vertical, pues plantea limitaciones interesantes tanto para directores como para espectadores, que obligan a hacer y a ver de una manera distinta a la acostumbrada. El director de origen oaxaqueño, Rigoberto Perezcano (creador, entre otros filmes, de Carmín Tropical) recibió gustoso la invitación a participar en el proyecto. “Siempre tomo Nespresso pero nunca había colaborado con la empresa, y hacerlo de esta manera es algo que me entusiasma”, afirmó. Rigoberto ha sido docente en el Centro de Capacitación Cinematográfica de la Ciudad de México y ha impartido diversos talleres al interior de la República, por ello, la posibilidad de transmitir su experiencia le resulta sumamente atractiva.
EL FUTURO
Mariana, Ximena, Claudia y Rigo coinciden en que el cine mexicano vive un gran momento. El año pasado se alcanzó la cifra histórica de 160 películas filmadas, semejante a las de los mejores años de la Época de Oro. El público nacional está regresando a las salas para ver el cine hecho en su propio país, y en eventos internacionales suenan los nombres de cineastas mexicanos que han logrado triunfar alrededor del mundo. Coinciden también en que el cine tiene el poder para influir en las personas e impulsar cambios positivos en situaciones que los requieren.