MÉXICO ES GRANDE
En los momentos que siguieron al desastre, el país dio una emotiva muestra al mundo de lo mejor que tiene: sus ciudadanos. Aquí, un tributo al héroe que hay dentro de todos y cada uno de nosotros.
Martha se enteró que en el parque de su colonia se creó un centro de acopio y llevó botellas de agua a Susana, que coordina la entrega de víveres a las distintas zonas donde la catástrofe alcanzó a lastimar a la ciudad. Ella le da instrucciones a Jaime sobre cómo cargar la camioneta que les prestó su vecino Raúl para llegar a la colonia Narvarte y, ahí, entregar lo recaudado a Ricardo, quién da instrucciones a los camiones cargueros que Federico ha puesto a disposición para llegar hasta Morelos y Puebla...
Es verdad que el dolor paraliza y las catástrofes lastiman y ésta no será la excepción, pero aún con los hombros pesados por la carga del caos, todos buscan ayudar. Porque la cadena en el párrafo de arriba podrá cambiar de nombres y de ubicación, pero se repite en cada rincón.
El diario inglés The Telegraph abrió la información sobre el sismo del 19 de septiembre de 2017 con un mensaje claro: “Lo mejor de México”, una frase que deja en claro que eso está en sus ciudadanos. “Al observar las brigadas que se formaron a los pocos minutos del desastre y al contemplar las imágenes de solidaridad, queda claro que en este mundo hay visos de esperanza”, menciona la nota resaltando que, en la adversidad, los mexicanos no olvidan el dolor ajeno hasta hacerlo propio.
“El pueblo mexicano es fuerza y fe”, mencionó otro diario en Colombia. Uno en España dijo que “la fuerza siempre la sacan de la unión” y, en otros rincones, el encabezado fue simplemente “Solidaridad mexicana”. Un concepto que para la RAE implica una “adhesión circunstancial a las causas”, pero que en México se ha adaptado a una adhesión natural al dolor.
A una empatía de toda la comunidad que demuestra que la unión es el mayor acto contra la adversidad y gracias a ella hoy podemos reconstruir, aún con la destrucción encima. Hoy, queda claro que estamos listos para mostrar que esos visos de esperanza que ven afuera sean el motor para recuperarnos adentro.