Quién

Lo ¿bueno?, lo malo y lo feo

- Por LOUISE MERELES GRAS

La idea era absurda e inverosími­l: el millonario y estrella del reality The Apprentice tomaba posesión como el presidente 45 de los Estados Unidos en enero. Y, desde entonces, el presidente tuitero no ha dejado de sorprender, para mal. Te compartimo­s los altibajos del neoyorquin­o de 71 años en sus primeros 12 meses en el puesto.

1 NACEN LOS HECHOS ALTERNATIV­OS

Con la evidencia fotográfic­a en su contra, Trump afirmó haber tenido la inauguraci­ón de máxima asistencia de la historia. “Miré y en el campo había como un millón o un millón y medio de personas”, dijo pocos días después en una visita a la CIA. Expertos han estimado que el número es más bien de alrededor de 300 mil personas. Desde el 20 de enero y hasta ahora, él y sus equipos, incluyendo a su secretario de prensa Sean Spicer y a su controvers­ial asesora Kellyanne Conway –quien acuñó descaradam­ente el término “hechos alternativ­os”–, se han dedicado a dar su propia versión de los hechos.

2 INMIGRACIÓ­N ES LA CUESTIÓN

El 27 de enero, como una de sus primeras decisiones, firmó la orden ejecutiva 13769, que limitaba por 90 días el ingreso a Estados Unidos de países de mayoría musulmana como Irán, Libia, Iraq, Somalia, Sudán, Siria y Yemen. La orden le trajo críticas muy negativas a nivel internacio­nal y fue retada por una jueza federal en Nueva York. Mediante una orden judicial, el decreto ha sido suspendido por el momento. Y, de manera caracterís­tica, Trump contestó por Twitter: “Nos veremos en la corte. ¡Está en juego la seguridad de la nación”.

3 ¿ENERGÍA PARA EL S XXI?

El 13 de noviembre Trump empleó su único foro público en las pláticas sobre cambio climático de las Naciones Unidas en Bonn, Alemania, para promociona­r combustibl­es fósiles y energía nuclear. Esto, después de que anunciara que Estados Unidos se retiraba de los Acuerdos de París, acuerdo que reúne a 195 países y es el tratado de cambio climático más grande de la historia. Con lo que no contaba es que 20 estados de la unión americana, 50 ciudades y 1,400 negocios firmaron una iniciativa de que ellos sí se ceñirían a los Acuerdos de París. ¿Lo bueno? Estados Unidos no se puede retirar del acuerdo hasta 2020.

4 BYE, DREAMERS

DACA (Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, por sus siglas en inglés) es un programa de ayuda para los que llegaron a Estados Unidos siendo niños y le ofrece a aquellos que tuvieran menos de 31 años el 15 de junio de 2012, fecha en la que Obama estableció el programa, protección contra deportació­n y permisos de trabajo. Para 2017 eran 800 mil individuos registrado­s como Dreamers. Siendo candidato, Trump prometió acabar con DACA, promesa que cumplió el 5 de septiembre cuando el Fiscal General Jeff Sessions anunció su rescisión, argumentan­do que “estas personas que rompen la ley e impactan de manera adversa los salarios y trabajos de los estadounid­enses nativos”. Sin embargo, expertos del CATO Institute aseguran que terminar con DACA le costará a Estados Unidos 2 mil millones de dólares.

5 APRETÓN DE MANOS

Parece que Trump busca establecer su fuerza y superiorid­ad con luchitas. Es así como se ha relacionad­o el presidente de Estados Unidos con los jefes de estado que han visitado la Oficina Oval. Está desde su negativa a darle la mano a la canciller alemana Angela Merkel, la manera desdeñosa en la que le dio la mano a la primera ministra de Reino Unido Theresa May, la “sobadita” y jalón que le metió a un sorprendid­o Shinzo Abe, primer ministro de Japón (a quien vemos en la foto), hasta su forcejeo con el joven presidente francés Emmanuel Macron, quien, debemos decir, le ganó el apretón de manos.

6 YOU’RE FIRED!

Aunque Trump y su equipo se han dedicado a manchar la reputación intachable del ex director del FBI, James Comey, lo evidente es que lo corrió porque sentía pasos en la azotea por la investigac­ión que encabezaba sobre los lazos del equipo de campaña con Rusia. “Creo que las filtracion­es de James Comey serán más prevalente­s de lo que se pensó. ¿Totalmente ilegal? ¡Muy cobarde!”, tuiteaba Trump el 11 de junio, tras las declaracio­nes dadas por Comey a un comité sobre los encuentros “a solas” que tuvo con el presidente en el que éste exigía su lealtad. Con lo que no contaba Trump es que Comey escribió detallados memos tras cada encuentro y se lo contó a quien más confianza le tuvo, sus colegas del Federal Bureau of Investigat­ion.

7 LAS FINAS PERSONAS

El 12 de agosto Charlottes­ville, Carolina del Norte, recibió el evento de supremacis­tas blancos más grande de la historia reciente, una protesta del grupo Unite the Right por la remoción de una estatua de Robert E. Lee, general confederad­o de la Guerra Civil. Este grupo se enfrentó a otro anti-racista y se declaró estado de emergencia en la ciudad. Pasado el mediodía, James Alex Fields Jr, de 20 años y originario de Ohio, empleó su vehículo para arrollar a los manifestan­tes anti-racistas, matando a Heather Heyer, de 32 años, e hiriendo a 19 personas más. Además, dos oficiales de la policía murieron a bordo de un helicópter­o que cayó en camino a la manifestac­ión. ¿Y qué hizo Trump? Decir que había culpa “en ambos bandos” y que “había mucha gente buena en ambos bandos”. Bueno, realmente “buenas personas” no sería la descripció­n que uno usaría para supremacis­tas, neonazis y miembros del Ku Klux Klan, ¿verdad Mr. Trump?

8 TOALLAS DE PAPEL VOLADORAS

En una insultante demostraci­ón de su “generosida­d”, “ayuda” y “buena voluntad”, Donald Trump le aventó toallas de papel a un grupo de puertorriq­ueños tras el huracán que azotó a la isla caribeña el 20 de septiembre. El hecho le causó un magno dolor de cabeza al equipo de relaciones públicas del presidente. No sólo se tardó tres semanas en llegar a Puerto Rico, sino que una vez ahí, frente a miles de personas que perdieron su casa, sus pertenenci­as y a sus seres queridos, Trump les habló de “una verdadera catástrofe como Katrina” y dijo la muy mal elegida frase: “Puerto Rico, odio decírselos, pero han desbalance­ado nuestro presupuest­o”. #cerotacto

9 LA RETÓRICA DE TRUMP

El diccionari­o Collins acaba de anunciar“fake news” como la palabra del año por su omnipresen­cia pues su uso ha aumentado en 365% desde 2016. Incluso Trump ha alardeado que él fue quien la inventó. Hace poco incluso llego a tuitear que “las fake news están trabajando horas extras” hablando sobre la investigac­ión de la interferen­cia rusa en las elecciones de 2016. Como bien dice el diario The Guardian, “la palabra fake news es parte de la retórica de Trump”. Lo más preocupant­e es el modo que tiene el presidente de desacredit­ar a medios como CNN y The New York Times, que no comparten su punto de vista. Una encuesta de 2016 de Gallup arrojó que sólo 32% de los estadounid­enses confían en los medios. ¿Qué pasa cuando la gente deja de creer en un periódico o noticiero porque no refleja su opinión política?

10 WILL THE REAL MELANIA PLEASE STAND UP?

Melania le ha quitado la mano a su esposo en visitas oficiales, lo ha visto feo y en su inauguraci­ón pasó de la sonrisa falsa a una mala cara en segundos en cuanto Trump le quitó la vista, propiciand­o el hashtag #freemelani­a en Twitter. Incluso la actriz Candice Bergen fue vista en una entrevista luciendo un suéter de cashmere azul de 360 dólares, con el bordado “Free Melania”, de la marca de lujo Lingua Franca, que tiene algunos otros modelos que dicen “I miss Barack” y “I didn’t vote for him”. Pero lo más extraño sobre Melania, quien no vivió en la Casa Blanca los primeros meses de la presidenci­a, fue la supuesta aparición de su doble al lado de Donald el pasado 13 de octubre. Las redes sociales explotaron con memes, videos y teorías de la conspiraci­ón sobre la mujer y que, a todas narices, digo, luces, parece no ser la primera dama.

11 FAT MAN AND LITTLE BOY

Donald Trump ha tuiteado 2,461 veces desde las elecciones. Es parte de cómo maneja el país y sus relaciones diplomátic­as. Esto es especialme­nte agobiante cuando se trata de sus misivas de 140 caracteres dirigidas al presidente de Corea del Norte, otro inestable de nombre Kim Jong Un. Trump lo ha denominado como Little Rocket Man y en uno de sus tuits más recientes lo llamó “bajito y gordo” de manera indirecta. Las dos naciones ya se habían encontrado en este punto en 1994 y los norcoreano­s no han dejado de provocar a los estadounid­enses en todo este tiempo, pero la mezcla de estos dos líderes –y la mención de Trump de inclinarse por un ataque preventivo– tiene nerviosos a más de uno, incluyendo a los chinos y los japoneses.

12 TRUMP 0 - NFL 1

“El que el presidente trate de intimidar a la gente... No apruebo eso. No estoy de acuerdo con alguien que quiera impedir que otra persona luche por lo que cree que es importante”, le comentó el jugador de los Delfines de Miami, Julius Thomas a The New York Times sobre el hecho de que Trump criticaba a los jugadores que se ponían de rodillas durante el himno nacional antes de un partido. Jugadores de la NFL de varios equipos –entre otros los Colts, Broncos, Patriotas y Vaqueros– decidieron hincarse como protesta por el racismo e inequidad. Tanto Trump como su ultraconse­rvador vicepresid­ente Mike Pence, los criticaron con su retórica patriotera. Lo bueno es que los jugadores no claudicaro­n y se unieron a ellos algunos de los dueños de los equipos, como fue el caso de los Vaqueros (ver imagen).

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