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ÁRBITRO NO MARCÓ DOS PENALTIS PARA LOS VISITANTES Con un doblete de Cecilio Domínguez, América derrotó a Pachuca, que no opuso resistencia ante el ataque águila

l futbol y sus héroes viajan de la mano con sus misteriosos simbolismos. El ‘10’ en la espalda está destinado para los grandes partidos. Cecilio Domínguez lo supo desde su condición de refuerzo anónimo, que definió el encuentro ante un Pachuca cansino.

El América festejó casi antes de anotar. Tuvo prisa de gol. Fue tan veloz que ya ganaba el partido casi antes de jugarlo.

No habían pasado ni tres minutos cuando un cabezazo de Cecilio se parecía mucho a la charla previa. Con una cuota de motivación implícita y otra de colocación, el paraguayo adivinó un centro por derecha enviado por Paul Aguilar; la pelota fue a la red, como consecuencia de tanto entendimiento.

Los 726 juegos de Óscar Pérez no atajaron lo inesperado. Ni su pasado ni su presente podían, esta vez, con el presente y el futuro del América, que vestía el ‘10’.

Después apareció César Ramos: el árbitro previsor, que lleva dos silbatos, dos relojes, pero que no usa gafas y no marcó dos penaltis a favor de las Águilas, como confirmación de que las precauciones no silban.

Pachuca era una sombra multiplicada en la opacidad; distorsionado, supo que el rival era más. Y así, el América maximizó esa complicidad. Darwin Quintero olió la sangre y escarbó por derecha hasta mandar un balón despejado en la línea de meta; Pachuca quiso hacer de un despeje un respiro y sólo consiguió que fuera un suicidio; mientras la defensa tuza había pensado que la pelota había salido de la cancha, Silvio Romero les ganó la espalda; retrasó para Cecilio, que con un punterazo de derecha hizo el segundo que despertó al local de su siesta.

Después, Guido Rodríguez fue expulsado y los Tuzos tuvieron un par de acciones, una pegó en el poste y otra se fue arriba del travesaño. Daba la sensación de que en diez minutos querían recuperar la memoria después de todo el futbol olvidado.

De esa manera, las Águilas descansaron sus esfuerzos ofensivos en Cecilio Domínguez, el futbolista de los dos goles y una actuación de ‘10’.