Fue parteaguas en las pistas
Ana Guevara destacó en el atletismo al conseguir preseas importantes a nivel internacional
En el reto que enfrentará en la Conade, Ana Gabriela Guevara estará facultada para cumplir con el cargo, pues rompió esquemas y, con todos los pronósticos en contra, marcó un antes y un después en el deporte mexicano al demostrarle al mundo su grandeza.
Abrirse camino en el deporte no fue fácil para ella, pues los referentes en su deporte eran hombres. Sin embargo, gracias a su garra, entrega, constancia y dedicación se ganó a pulso el reconocimiento nacional e internacional en la pista.
La sonorense de 1.73 metros de altura subió a lo más alto del podio en el Campeonato Mundial de Atletismo París 2003 en los 400 metros planos.
Al año siguiente se colgó la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, única presea del país en pruebas de velocidad de atletismo en la máxima justa deportiva.
En su palmarés también presume las dos medallas mundiales de bronce de Edmonton 2001 y Helsinki 2005, así como los oros de la Copa del Mundo de Atletismo Madrid 2002 en los 400 metros y el relevo 4x400 metros, títulos en Juegos Panamericanos, Centroamericanos y del Caribe y en Campeonato Iberoamericano.
En enero de 2008 se retiró de las pistas, donde dejó una huella imborrable.
Ya en la administración pública, Guevara dirigió el Instituto del Deporte del Distrito Federal en 2008 por invitación del entonces jefe de gobierno Marcelo Ebrard.
Fue Senadora por el Partido del Trabajo (PT) y, posteriormente, ganó una diputación federal por el Distrito 2 con cabecera en Nogales, municipio del que es originaria la medallista olímpica tricolor.