MODUS OPERANDI, REVELADO
RÉCORD tuvo acceso a dos casos en los que la directiva de Veracruz pidió la firma de doble contrato y después dejó de pagar a los jugadores
Memo Vázquez se fue de un equipo al que sólo la necesidad de aparecer en la palestra del futbol mexicano lo había llevado.
Vázquez quería regresar al escenario luego de rechazar un par de ofertas mejores y cuando el mar dejó de abrirse, tomó al Veracruz con todos los riesgos que eso llevaba.
Una directiva incendiaria con presupuesto incierto y una afición fiel, pero cansada de tantas promesas incumplidas.
El Veracruz, con Memo, nunca terminó por cuajar y se salvó de milagro gracias a externos que hicieron peor las cosas. Lo extraño fue que el propio entrenador retomara el trabajo sabiendo que las cosas seguían ardientes y todo quedó de manifiesto cuando se fue tras ganarle un clásico al Puebla.
Extraño todo desde el principio. Está claro que Veracruz merece otra manos dirigenciales que lo catapulten a la par de la historia y la plaza que representa, pero también es cierto que Vázquez todavía tiene cartel como para no estar hundiéndose con proyectos por debajo de la media tabla.
Las palabras fuera de sentido por parte del señor Kuri, denigrando a su exentrenador, hablando por sí solas de la educación y las maneras con las que se maneja el todavía propietario del tiburón. Una pena.
Por otro lado, surgió la fuerte versión que Vázquez decidió irse en la fecha cuatro al ver que el barco se hundiría de nueva cuenta y optó por limpiar su nombre porque en los meses venideros podría sonar fuerte para un equipo del norte, específicamente Tigres, siempre y cuando Tuca agarre en enero a la Selección. Incluso, el mismo Memo, de no tomar a los felinos, podría ser uno de los auxiliares de Ferretti en el Tricolor. De ser así, Vázquez movió sus piezas otra vez y ahora no se equivocó.
Tras la 'denuncia' de Guillermo Vázquez sobre la existencia de dobles contratos en Veracruz, RÉCORD investigó y tuvo acceso a los casos de Sosthenes José Santos Salles y Alan Santos, que evidencian la forma de operar de la directiva escuala.
Cada documento contractual tiene ānes especíācos uno, el que queda registrado ante la Federación Mexicana de Futbol, reāere un menor ingreso para el futbolista, que es saldado por el club; mientras que el segundo estipula la cesión de derechos de imagen con otra empresa, ajena al negocio del futbol, y el mayor porcentaje de la remuneración.
“El caso de Neto (Sosthenes), se pactó un salario mensual de alrededor de 40 mil dólares. Lo que hace Veracruz lo divide en 10 por ciento en contrato laboral, es el que va a tener registro ante la FMF, y el otro 90 por ciento en