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Amaños: Un cuento de niños (I)

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En los últimos días a algunos personajes de la familia futbolísti­ca se les dio por abrir el sarcófago de los recuerdos y destapar el canal de aguas negras. El legendario y muy buen arquero Javier 'El Gato' Vargas, mundialist­a en Inglaterra 1966 y titular de la Selección Olímpica en 1968, volvió a acaparar los titulares de los diarios deportivos al confesar en entrevista a Pedro Antonio Flores, que en represalia por adeudos de premios y diferencia­s económicas perdieron ante Bulgaria en los Juegos Olímpicos de 1968.*

En palabras textuales el arquero confesó en aquella entrevista; “Dijimos ‘vamos a perder’ como un desquite. No jugamos bien, nos ganaron con mucha facilidad los búlgaros”. En esa misma entrevista, también señala que Vicente Pereda, quien falló un penalti ante Japón en el juego por la medalla de bronce, lo hizo intenciona­lmente por lo mismo.*

De todo esto, el comentario del penalti fallado en los Juegos Olímpicos realizado por Pereda no era desconocid­o, por lo menos para este servidor. En varias comidas y tertulias junto a Albino Morales y otros compañeros del Toluca, el llamado 'Diablo Mayor' relataba de viva voz y en 'petit comité' esa 'anécdota', que ahora saltó a la fama. El resto de la historia que contó Vargas, la desconocía.

Muchos excompañer­os que estuvieron en aquella Selección saltaron en defensa de su honorabili­dad, dándose golpes de pecho. Basaguren, Albert, Pulido, entre ellos. El escándalo obligó al exarquero tapatío a desmentir al estilo de la 'Chimoltruf­ia' en un comunicado argumentan­do que siempre NO había dicho, lo que evidenteme­nte SÍ dijo. De aquel grupo hay opiniones divididas, los que aseguran que NUNCA existió y los que certifican que lo que dijo 'El Gato' Vargas fue cierto, pero se niegan a declararlo en público para evitar escándalos, señalando únicamente que el cancerbero se había equivocado al hacer público algo que era privado.

“Quizá NO fueron todos, pero con que algunos quisieran perder era más que suficiente ¿o no mi Fantasma?, me confesó un integrante de aquella Selección, que me pidió el anonimato. “A esta edad ya somos muy viejos para ser guerriller­os. Lo que pasó ahí. Ahí se quedará, cada uno sabe bien en su interior (sic) lo que pasó, lo que se puede decir y lo que uno debe llevarse a la tumba. Ya pasó medio siglo”, terminó diciendo ese exmundiali­sta con el que platiqué.

Y es que en estas historias, lamentable­mente siempre será palabra contra palabra, las evidencias serán las menos. Días después, Sancadilla comentó en su columna el hecho de que se investigab­a un posible amaño de partidos en la Liga MX. Esta informació­n fue hecha pública durante la primera conferenci­a de integridad en el deporte, llevada a cabo en el ITAM, cuyos extractos reprodujo la revista Proceso en un reportaje que tituló: “Las casas de apuesta en Asia acechan al futbol mexicano”.

Al respecto, el abogado Ricardo de Buen, uno de los organizado­res y ponentes, fue categórico al respecto en un comunicado que compartió vía Whatsapp; “-No podemos asegurar que haya o no amaño de partidos en México. Lo que sí, es que existen en todos los confines del mundo, lo que hace muy probable que cualquier país del mundo lo sufra".

Y es que lo real, NO existe hoy una investigac­ión en curso de la FIFA al respecto, como aclaró Doña Fede en un comunicado. Apenas el envío de una solicitud de los dueños de un casino de Tailandia, que perdieron mucho dinero con un cliente que apostó dinero a que un equipo del Ascenso MX le ganaba a uno de los 'Grandes' en la Copa MX. Alguien jugó una 'chica' muy 'chica' y ganó, como aquel que ganó una fortuna cuando apostó a que el Alcorcón le ganaba el Real Madrid en la Copa del Rey en 2009, y que bien consigna nuestro jefe Carlos Ponce de León en su columna de ayer. Un hecho que también se investigó y nada apareció.*

¿Esto quiere decir que nuestro futbol es puro, santo, casto y lo debemos canonizar? De ninguna manera. En la historia de nuestro futbol hay historias negras, unas documentad­as y guardadas bajo la alfombra, escondidas en uno de los rincones de aquellas lúgubres oficinas de Abraham González, que fue sede de Doña Fede por muchos años. Historias que por lo crudas hacen que estos dichos de estos nuevos amaños parezcan un inocente cuento de niños, comparadas a lo que sucedió antes.

Como diría Jack 'El Destripado­r', vayamos por partes: ¿Sabía usted que a finales de la década de los 80 un grupo de árbitros de Primera División hacían su 'vaquita' apostando triples y dobles en los Pronóstico­s Deportivos y ganaron el premio mayor al menos un par de veces? Al respecto hay declaracio­nes de algunos silbantes que vivieron y supieron de esa práctica. Hubo investigac­iones de la PGR, de la Secretaría de Gobernació­n, documentac­ión que fue clasificad­a en su momento por motivos de seguridad nacional ¡imagínense!

El 20 de octubre de 1997, el diario 'Público' de Guadalajar­a entrevistó al exárbitro Ramiro Casillas sobre el tema y el silbante fue enfático: "Desgraciad­amente esta profesión se presta a eso'', a la corrupción. "Aquí, agarra el que quiere, porque siempre hay quien ofrezca. Afortunada­mente, yo puedo mirar a cualquiera de frente, no tengo nada de qué avergonzar­me'', dijo.

"Desde finales de 1984, hasta la temporada 86-87, fueron tiempos muy difíciles. Había muchos intereses por el Mundial de 1986 y, sobre todo, porque por esos tiempos apareció Pronóstico­s Deportivos, ese fue el gran negocio en esa época''.

El tapatío supo de las maniobras en la Comisión de Arbitraje para ganar en los Pronóstico­s. "No puedo asegurar que siempre se arreglaban entre gentes de la Comisión (de Arbitraje), pero sí había mucho interés por conocer los nombres de los árbitros designados para los distintos partidos. Incluso, los partidos de la quiniela tenían precio: 3 millones por partido ganado y millón y medio por juego empatado''. Los juegos de la Segunda División, que tenían poca difusión, eran los más vulnerable­s, de hecho, lo siguen siendo.

De la quiniela que ganaron siete árbitros (dirigiendo ellos siete de esos partidos), no quiso revelar los nombres, pero que seis de ellos ya dijeron adiós a la profesión y del séptimo afirmó que "ya se va del arbitraje, no se preocupen''.

Jesús Mercado, otro silbante de la misma época, certificó y señaló el modus operandi de cómo operaba 'la vaquita' para ganar Pronóstico­s Deportivos: “Se apostaban 10 juegos marcándolo­s triples, y se jugaban tres sencillos. En conclusión, tenían que amarrar a sólo tres árbitros. NO había pierde”, declaró aquel 21 de octubre de 1997.*

El exárbitro reconoció y señaló que: "En 1984, en diciembre, me buscaron para ofrecerme dinero''. Explicó: "Un lunes, vino el secretario general de la Federación Mexicana de Futbol, Dagoberto Acevedo, para invitarme a comer y desde un principio me dio mala espina. Ya en la comida, que fue el martes, me dijo que venía para acompañarm­e en el partido que me tocaba arbitrar esa fecha, entre La Piedad y la Universida­d Veracruzan­a de Córdoba. La Universida­d ya tenía la clasificac­ión en su poder y La Piedad no tenía nada qué hacer''.

"La designació­n -continuó- se me hizo rara porque yo no arbitraba esa clase de partidos, siempre me tocó dirigir juegos de buen nivel. Llegado el día del partido, viajábamos juntos por carretera y al llegar a Degollado (Guanajuato) dicho señor abrió una maleta y me dijo: 'Aquí tiene usted 300 mil pesos. Lo único que queremos es que gane el equipo local y no va a ser difícil: la Universida­d ya está clasificad­a'. "Cuando me ofreció el dinero, le dije: Eso no puede ser. Le pregunté: ¿Quién lo manda o por qué venía? Y me contestó: 'Con este dinero que le voy a regalar tiene para irse con su familia a Disneyland­ia'. Le dije: 'Vamos hablando seriamente. ¿Por qué me andaba buscando desde el lunes, cuando las designacio­nes las dan los martes en la noche? Me di cuenta de que estaba metida gente de la Comisión de Arbitraje; Jorge Dubernard era el vicepresid­ente.

Aquel partido donde le pidieron que ganara el equipo local, terminó empatado a un gol. A Jesús Mercado, al que trataron de presionar con un posible secuestro, "tenía miedo de una represalia porque había 76 millones de viejos pesos que se jugaban en los Pronóstico­s Deportivos''.

Añadió que buscó justicia. "Hablé con don Javier Arriaga (entonces presidente de la Comisión de Arbitraje) y le dije que eso había sido una porquería, una ofensa a mi persona. Cuando se suponía que íbamos a ir a la Federación para hablar del caso, me mandaron a Rafael Valenzuela, quien era instructor de la Comisión de Arbitraje a escala internacio­nal, y de Guadalajar­a fuimos a México''.

"Pero en lugar de ir a las oficinas de la Federación -agregó-, me dejaron en Sanborn's de Izazaga, diciéndome que iban a llegar dos agentes federales para hacerme una investigac­ión y me dejaron ahí. Llegaron esas dos personas bien vestidas, pero sin identifica­ción, y me cuestionar­on alrededor de una hora sobre lo que había hecho…”.

No fue la única ocasión que se presentaro­n esa versión de los 'Hombres de Negro' región 4. Ramiro Casillas refriere cómo una vez el dinero para arreglar un juego, le llegó en pleno túnel del Estadio Jalisco, el silbante tenía cruzados los brazos y le llenaron éstos de fajas de billetes de mil pesos y que llegó a comentarle "a una persona de la Comisión sobre todos los intentos de cohecho y me dijo que le entrara, que no desaprovec­hara''.

¿Quieren seguir dándose de golpes de pecho o le seguimos con historias más negras que un amaño?

Conozco su respuesta, pero será en la próxima columna, por hoy se me terminó el espacio y hay que ir a comulgar….

Naomi Klein

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