El 'pecado prohibido' de América
EL DINERO NO ESTÁ POR ENCIMA DE LOS VALORES DEL FUTBOL Y DE UN EQUIPO
Sigilosa y hasta descaradamente, el América está preparando el escenario para permitir el regreso de Renato Ibarra a su camiseta.
El tiempo se acorta. La pretemporada está a la vuelta de la esquina y pronto tendremos una fecha oficial para el reinicio del futbol en México, pero el América sabe que hay un 'pecado prohibido', uno que no puede cometer.
Dos frases de Miguel Herrera durante la semana parecen dejar en claro la postura del club: “Todos los seres humanos merecen una segunda oportunidad. El América no va a perder dinero con Renato Ibarra”.
La desfachatez absoluta de Santiago Baños y del 'Piojo'. Defender el negocio de un futbolista e ignorar la responsabilidad social de un club como el América y de la empresa que está detrás del equipo. Renato Ibarra fue un 'mal negocio' y punto. Debe mantenerse lo más lejos posible del club, de sus ideales, de su historia, de sus niños. El dinero no está por encima de los valores en el futbol, aunque a veces haya desvergonzados que opinen lo contrario.
Hay cosas que el América no puede darse el lujo de hacer, por ser, simplemente, el América. Una de ellas, solapar a un golpeador de mujeres por el frívolo hecho de que significa un negocio. La realidad es que, para información del 'Piojo', el América podría perder mucho más que dinero si sigue ignorando el fondo del mensaje que envía al no desligarse por completo del futbolista ecuatoriano.
Ibarra cometió un terrible error, cruzó una línea que no tiene regreso y que, para un club del abolengo y la grandeza del América, más hay que sumarle el tamaño y la trascendencia de la empresa que está detrás del América, no hay forma de esconder o de disfrazar. Es el América por lo que vale y significa para nuestros aficionados y para nuestra cultura popular. Es la empresa que es propietaria del equipo porque no hace ni cemento ni cerveza ni bebidas embotelladas, es una empresa ligada directamente a la sociedad mexicana, a su educación, a sus valores y a sus compromisos históricos.
Renato Ibarra era el mejor futbolista del América, en condiciones y también en las repercusiones futbolísticas que generaba de mediocampo hacía arriba. Un problema personal se ha hecho público y no es la época, tampoco la tendencia, ni se trata de una moda, es un atropello directo contra los derechos de una mujer en un país tradicionalmente acusado de machista y misógino.
La forma de resolverlo es muy sencilla: el América debe poner a la venta a Ibarra para que regrese a su país o que vaya a cualquier otro futbol en el mundo. Debe pasar por un proceso ante profesionales, médicos, psicólogos, terapias y cuando muestre que está recuperado, puede volver al futbol mexicano. Hoy, no puede ni debe tener cabida en ningún club del futbol de México y mucho menos en uno del nivel deportivo y social del América. Si pierde dinero, no pasa nada. Hay negocios que en el futbol se estropean por un tema de baja futbolística, de lesión y en este caso, se trata de algo todavía mucho más grave.
La doble moral de Santiago Baños y de Miguel Herrera. Permitirle regresar al club porque es un activo del mismo. Me parece un descaro, una desfachatez, un hecho que avergüenza la historia del América, de sus grandes héroes de la cancha y de sus millones de aficionados.
Renato es un 'pecado' que el América no puede cometer. Así sacrifique en lo futbolístico y en lo económico, porque los grandes clubes también viven de su fortaleza ética y moral. El América sabe que es el mejor momento para mostrarla.
Yon de Luisa, presidente de la Federación Mexicana de Futbol, aclaró que sí existió una fianza por parte de los Tiburones Rojos de Veracruz durante su última temporada en la Primera División, en el torneo Apertura 2019.
"En el caso Veracruz sí hubo una fianza, de hecho, fue del doble de lo que se documentó. La fianza fue de 10 millones de dólares o el equivalente en pesos en aquel momento y se está trabajando para que se pueda cobrar.
"También argumentaban que ya nos tardamos mucho, no es tan sencillo cobrar una fianza. Es un proceso legal que están haciendo los abogados de la Federación Mexicana de Futbol y es trabajar con la afianzadora para que ésta reconozca cada una de las deudas documentadas del club Veracruz a cada uno de los empleados, en este caso, a los jugadores y cuerpos técnicos", afirmó De Luisa en entrevista con RÉCORD.
El mandamás de la Federación Mexicana recalcó que, al ser un problema legal, el tema lleva su tiempo para poder resolverse y dejó claro que los pagos que se adeudan le corresponderá hacerlos al conjunto escualo y no a la Federación.
"La afianzadora lo que está haciendo es analizar a profundidad los contratos reclamados, uno por uno, entonces desde luego va a llevar tiempo. Hay que ver cuáles son las garantías para ejercer las fianzas y sí, dejar en claro que los responsables de los pagos a los jugadores son los clubes, no la FMF”, agregó el directivo del órgano rector del balompié nacional.