UN LIDERATO PICANTE
REAL MADRID MANEJA SU DESTINO, TRAS GANAR DE VISITA EN UN JUEGO LLENO DE POLÉMICAS DECISIONES DEL VAR
El Real Madrid es nuevo líder de La Liga y en sus manos está el ser campeón a falta de ocho jornadas del final... eso sí, no sin antes ganar en un juego polémico y en donde se habla más del árbitro y del VAR que de otra cosa.
Tres jugadas que marcaron el duelo en San Sebastián y que pueden dar rumbo al título español. Un penalti a Vinicius, un gol anulado a los vascos y una posible mano de Benzema en el segundo gol merengue son parte del debate del triunfo. Madrid y Barcelona están igualados en puntos, pero el duelo directo le está dando el título a los blancos.
“Va a ser muy difícil ganar esta Liga, porque no depende de nosotros. Veo difícil que el Real Madrid pierda puntos, viendo cómo han ido estas dos jornadas va a ser difícil”, lanzaba el viernes Gerard Piqué, haciendo alusión a polémicos arbitrajes en favor del cuadro merengue. Y parece que no erró en su vaticinio.
Ramos cobró un penalti que llegó en una falta sobre Vinicius a los 50 minutos y Benzema amplió con un derechazo a los 70'. La acción de Benzema fue validada por el videoarbitraje, luego de que hubo reclamos de que el delantero francés controló el balón con el brazo.
Con su gol, Ramos llegó a 68 anotaciones y superó a Ronald Koeman como segundo defensa más goleador en la historia de La Liga. Mientras que Benzema,
con 165 tantos, superó a Hugo Sánchez (164), para ser el quinto jugador del Real Madrid con más goles en la historia de La Liga.
Mikel Merino descontó por los anfitriones con un potente zurdazo a los 82', poniéndole emoción a los últimos minutos.
Poco antes del segundo tanto merengue, Januzaj vio anulado un gol por el juez de línea, después de un tiro rasante que pasó a un lado de Portu, quien estaba en posición adelantada, y el árbitro señaló que estorbó al arquero Thibaut Courtois.
“Lo que me molesta es que al final se habla sólo de los árbitros. Parece que no hemos hecho nada en el campo, pero la polémica no la vamos a controlar", dijo Zidane.
Ahora, a falta de ocho jornadas, el destino de La Liga está en manos merengues, que dependen de sí mismo para ganar el título que se les ha ido desde 2017.