CONTODA L.A. HISTORIA
LOS LAKERS BUSCAN SELLAR SU TÍTULO 17, PARA SUBIR A LA CIMA DE LA NBA COMO EL EQUIPO CON MÁS CORONAS
Con el impulso de uno de los códigos genéticos más poderosos de la NBA, la de LeBron James y Anthony Davis en unas Finales no es sino la crónica de una coronación anunciada, una fórmula de éxito tan rotundo que bien pudiera ser considerada como ley universal. Los Lakers están a un solo triunfo de conseguir el título 17 de su historia para convertirse en el equipo más ganador de la Liga, junto a los Celtics.
Tuvo que pasar una década de fracasos -incluida la peor racha sin Postemporada-, malas contrataciones, pérdidas de leyendas -deportiva y físicamente como la de Kobe Bryant- y problemas de pantalón largo para que la franquicia angelina convulsionara y volviera a luchar en la cima, donde le corresponde.
Esta noche, los de amarillo y púrpura tienen la oportunidad de dar el tiro de gracia al Heat con el Rey y su monstruosa estadística de 38 victorias en 48 partidos a punto de cerrar una serie de Playoffs por tan sólo 10 derrotas, es decir, 79.2 por ciento.
Y es que por más que tuvo cinco pérdidas de balón y sólo ocho puntos en los primeros dos cuartos del Juego 4, King James logró darle la vuelta a la adversidad para finalizar con 28 puntos, 12 rebotes, 8 asistencias y sólo una pérdida de balón en la segunda mitad para ver de frente a su cuarto anillo, colocándose en una élite angelina con nombres como George Mikan, Kareem Abdul-Jabbar, Magic Johnson, Shaq O'Neal y el más grande, Kobe.
Aunque al #23, de 35 años, lo persigue el fantasma de sus seis derrotas en Finales, ni siquiera haber resucitado a un equipo que navegaba en la mediocridad, parece razón suficiente para silenciar a sus más asiduos críticos, voces que se diluyen mientras del cielo el nombre de Bryant -a quien llevan bien puesto en el pecho- retumba en sus oídos y le muestra el camino para devolver a Los Angeles, el equipo de su vida, con el que ganó cinco anillos, al lugar que la historia misma le tiene reservado en la eternidad.
"Entendemos lo que está en juego. El trabajo no está hecho. Voy a seguir y no voy a dormir hasta que todo esté hecho"
LeBron James
D LAKERS