LA GEOGRAFÍA DEL LITIO
En todo el territorio nacional, el Servicio Geológico Mexicano ha determinado hasta ahora un total de 82 “áreas prospectivas” de litio, es decir, zonas del país que presentan indicios sobre la posible existencia de yacimientos de ese mineral que ha sido nacionalizado por el Gobierno de México, al considerarlo estratégico para concretar la denominada transición energética.
El organismo del Gobierno mexicano informó, vía transparencia, que las 82 localidades fueron definidas en diciembre de 2022 como áreas prospectivas de litio, sin embargo, aún se requieren de mayores estudios y labores de exploración en las mismas para poder confirmar con certeza la presencia en ellas de yacimientos de ese cotizado mineral.
Los registros proporcionados por el Servicio Geológico Mexicano muestran que estas “áreas prospectivas” de litio se han identificado en 18 entidades federativas del país, sin embargo, hay siete de ellas que destacan por tener cinco o más de estas zonas con probabilidades de resguardar yacimientos de esta naturaleza.
Se trata de Sonora, que ocupa el primer lugar, con 13 de estas “áreas prospectivas” de litio; Puebla, en el segundo sitio, con 12 de estos polígonos; Oaxaca, en el tercer escaño, con nueve; Nuevo León, en el cuarto lugar, con ocho “áreas prospectivas”; y
El Servicio Geológico Mexicano ha determinado hasta ahora un total de 82 “áreas prospectivas” de litio en todo el territorio nacional, esto es, zonas donde se presume la existencia de yacimientos de ese mineral que fue nacionalizado por el Gobierno del presidente López Obrador. Destacan estados como Sonora, Puebla, Oaxaca y Nuevo León
Durango, donde se han determinado siete de estos puntos (folio 330028124000004).
Los estados de Chihuahua y Tamaulipas aparecen con cinco “áreas prospectivas” cada uno; mientras que Coahuila, Guanajuato, Hidalgo, Jalisco, San Luis Potosí y Zacatecas, están en la lista cada uno con tres de estos polígonos. En el resto de las entidades federativas: Chiapas, Michoacán, Morelos, Sinaloa y Veracruz, el organismo federal solamente ha podido identificar una “área prospectiva” en cada uno de esos territorios.
El Servicio Geológico Mexicano también explicó las implicaciones de un “área prospectiva”.
“La identificación de nuevas áreas susceptibles de contener yacimientos minerales, se consideran como ‘áreas prospectivas’, mismas que, de acuerdo a los resultados que se obtengan de nuevos trabajos exploración, pasan a la siguiente etapa como ‘áreas de interés geológico-blancos de exploración’, en este sentido, si sus resultados continúan siendo favorables, pasan a integrar un portafolio de proyectos que justifican los trabajos de evaluación y factibilidad que serán básicos para su concurso a través de licitación pública a los interesados (folio 330028123000246)”.
La transición energética que se está dando globalmente para dejar atrás los combustibles fósiles, causantes del cambio climático, para adoptar así plenamente las energías renovables, requiere de dispositivos de almacenamiento como los que se elaboran con litio, de ahí la relevancia que ha adquirido este mineral.
Así lo ha expuesto el Gobierno mexicano: “la Comisión Económica de las Naciones Unidas para América Latina y el Caribe (CEPAL) ha enfatizado que la electromovilidad y el almacenamiento de energía
Aún se requieren de mayores estudios y labores de exploración en las áreas prospectivas de litio para poder confirmar con certeza la presencia en ellas de yacimientos de ese cotizado mineral
están remplazando el uso de motores de combustión interna, lo que ha provocado un aumento importante de la demanda de baterías de ion de litio. (…) la CEPAL reconoce al litio como estratégico para la transición energética y la electromovilidad”, según consta en el Decreto por el que, por causa de utilidad pública, se declara zona de reserva minera de litio la denominada ‘LI-MX 1’, del 18 de febrero de 2023.
Mirada municipal
En el caso de Sonora, el estado con más “áreas prospectivas” de litio, de acuerdo con los estudios del Servicio Geológico Mexicano, sus polígonos se encuentran en los siguientes municipios: Tubutama,
Santa Cruz, Pitiquito, Nacozari de García, Huasabas, Aconchi, Soyopa, Ónavas, Suaqui Grande, La Colorada, Divisaderos y Nogales (dos).
En Puebla, por su parte, los municipios que podrían tener yacimientos de dicho mineral estratégico, son los siguientes: Chiautla, Tehuitzingo, Petlalcingo, Izucar de Matamoros (dos), Tepeojuma (dos), Zapotitlán, Chietla (dos), Tepeyahualco, así como Guadalupe Victoria.
El estado de Oaxaca, el único del Sur mexicano que destaca entre las entidades con más “áreas prospectivas” de litio, tendría en los siguientes municipios las mayores probabilidades de descubrir yacimientos de dicho mineral: Santiago Ayuquililla, Ocotlán de Morelos (dos), Villa de Tamazulapam del Progreso, San Pablo Huitzo, San Francisco Telixtlahuaca, así como Santiago Tamazola (tres).
En Nuevo León, otro estado relevante en este ámbito (es el cuarto con más polígonos de este tipo), prácticamente todas sus “áreas prospectivas” de litio se encuentran en el municipio de Galeana (siete zonas), con excepción de una que se localiza en Bustamante.
Mientras que en el estado de Durango, el quinto con más de estas zonas delimitadas, la mayoría de sus “áreas prospectivas” se ubican en el municipio de Durango (cinco), complementando el listado una más en Tlahualilo, y otra en Canatlán.
La transición energética que se está dando globalmente para dejar atrás los combustibles fósiles, causantes del cambio climático, para adoptar energías renovables, requiere de dispositivos de almacenamiento como los que se elaboran con litio, de ahí la relevancia que ha adquirido este mineral
La advertencia
El 18 de marzo de 2024, durante el 86 Aniversario de la Expropiación Petrolera, el presidente, Andrés Manuel López Obrador, advirtió que el país debe “calcular” correctamente los pasos de su transición energética.
“Sin embargo, debemos calcular bien los tiempos de esa transición energética para no volver a caer en México en la dependencia del extranjero por dejar anticipadamente de invertir en la extracción de petróleo y en la producción de gasolinas y combustibles.
“Hace tres o cuatro años se esparció el rumor de que ya todos los carros iban a ser eléctricos, y se lo creyeron, no sólo los expertos, sino hasta los dueños de las grandes empresas petroleras extranjeras, y se empezaron a vender refinerías a precios bajos. Hace tres, cuatro años habían en venta, estaban en venta ocho, 10 refinerías en Texas, por eso aprovechamos a comprar Deer Park en 600 millones de dólares, un precio muy bajo. (…) ¿qué sucedió? Una vez que se constató de que todavía faltaba tiempo para prescindir de los motores de combustión interna, las refinerías existentes continuaron produciendo y hoy hay en el mundo aproximadamente 190 refinerías más en construcción”, dijo.