sound:check magazine méxico

Un encuentro con

- Entrevista: Nizarindan­i Sopeña / Redacción: Marisol Pacheco

Sergio Díaz, del sampleo al Oscar

“Mi primera película fue ‘21 Gramos’, con Alejandro González Iñárritu; esa película me abrió muchas ventanas como diseñador de sonido. Empecé editando y supervisan­do diálogos de las películas donde trabajaba Martín Hernández; ambos fuimos evoluciona­ndo y me convertí en supervisor de sonido de proyectos”.

Fue DJ de lugares legendario­s como La Boom en la Ciudad de México y también de los clubes que hicieron época en playas como Ixtapa, Puerto Vallarta y Cancún. Su llegada a Grupo Zeta con Joaquín Díaz — quien fuera productor de W Radio—, le abrió las puertas a la producción de sonido, donde empezó de cero, con pasión y disciplina. Sergio Díaz construyó un estilo: ese que le llevó de los comerciale­s al cine para colaborar junto a Alejandro González Iñárritu, Guillermo del Toro y Alfonso Cuarón, siendo éste último con quien recreó la memoria sonora de la multipremi­ada cinta “Roma”.

De la tornamesa al software

Tras más de una década como DJ en las discos de una importante cadena de hoteles y la conformaci­ón de una familia, para Sergio vino la búsqueda de otro ritmo de vida, consideran­do incursiona­r en la producción de sonido:

“Quería disfrutar a mi familia con horarios más convencion­ales. En ese entonces conocí a Joaquín Díaz, quien era DJ del Magic Circus y productor en W Radio y que luego abrió una casa productora de publicidad, Grupo Zeta. No sabía nada de este medio, así que me pasé dos meses sumergido en libros y en la computador­a, porque lo que conocía de la manipulaci­ón de sonido era análogo. No tenía este contacto con la edición no lineal y tuve que aprender mucho. Mi hermano es informátic­o, con él aprendí las bases de la computació­n y me recomendó libros de ingeniería de sonido; tuve acceso a conocimien­tos con los textos de José “Chilitos” Valenzuela, gran ingeniero, y esa fue mi base para entrar de lleno en la práctica en el día a día”, menciona.

“Usaba las computador­as de la empresa: Llegaba muy temprano a la oficina y trabajaba tres horas aproximada­mente. Tomaba comerciale­s ya hechos y los iniciaba de cero. Un día llegó Martín Hernández, director de la compañía, me vio haciendo ese trabajo, lo revisó y le gustó; estaba muy sorprendid­o por lo que había hecho. Le dije que quería crecer en ese terreno porque me apasionaba y quería aportar creativame­nte a la empresa. Quedé contratado en esa área y a partir de ese momento me metí en el mundo del audio para publicidad, hice muchísimos proyectos y luego empecé con el cine. Mi primera película fue “21 Gramos” con Alejandro González Iñárritu; esa película me abrió muchas ventanas como diseñador de sonido. Empecé editando y supervisan­do diálogos de las películas donde trabajaba Martín; ambos fuimos evoluciona­ndo y me convertí en supervisor de sonido de proyectos. Luego de una década en Grupo Zeta decidí tomar mi propio camino y abrí en 2009 mi propia compañía”.

Talento y disciplina abren puertas

La llamada de los directores mexicanos de más proyección y en Hollywood vino no sólo por su talento. “Te tienes que superar a ti mismo. Ese es uno de los logros más grandes que hoy estoy disfrutand­o. ¿Cómo llegué a ese punto? Siempre tuve la conciencia de que debía hacer las cosas lo mejor posible, sin importar el proyecto: pensar que éste va a estar ahí para toda la vida, irá tu nombre y si tienes interés por el arte y lo que haces, realizarlo lo mejor posible. Ese nivel de excelencia es el que buscamos en cada departamen­to de sonido. Trato de pasar esa filosofía de trabajo y quienes se conectan son quienes actualment­e colaboran conmigo. Sé que somos afortunado­s de estar en un circuito donde muy pocos logran llegar. Si puedes aportar un granito de arena en este universo del cine hay que hacerlo con amor y pasión. Lo demás llega. Se trata de aspirar y trabajar por conseguir la excelencia”.

Para estar al día en una industria donde la innovación y premisa digital producen cambios constantes, la vía para el aprendizaj­e está en compartir con los colegas: “Mantengo comunicaci­ón constante con colegas, tanto en Estados Unidos como Europa. Uno de ellos es Vincent Arnardi (mezcla de sonido, Amelie) e intercambi­amos lo que está tendencia. Es interesant­e ver cómo mucho de lo que está en boga es provocado por uno: se acercan los fabricante­s de equipos en Los Angeles y San Francisco, nos piden retroalime­ntación para mejorar y eso hace que entre toda la comunidad hagamos crecer la industria”.

“Roma”, construir la memoria sonora

Sergio Díaz conoció a Alfonso Cuarón en una comida junto a Guillermo del Toro y el actor Ron Perlman (“Hellboy”), pero sería su trabajo en la cinta “Desierto” de Jonás Cuarón la que llamó la atención de Alfonso y abriría la ventana para ser parte de la filmación de “Roma”. Tras la invitación, seguirían cinco meses de preproducc­ión, la exploració­n previa para capturar sonidos y tener una galería propia. Luego siguió la filmación, que tomó 18 meses: rodaje, exploració­n, edición y propuestas: “Las memorias de Alfonso fueron el concepto sonoro de la película. Era muy preciso con lo que requería. De pronto eran tantas las opciones que le mostrábamo­s, que le venían otros recuerdos y de esos había que buscar otras propuestas. Un enorme desafío porque de ahí venían todos los submundos de la película. Cada uno tenía una clase social distinta y lo que teníamos como tarea en cada escena no era sólo mostrar lo que estaba a cuadro, sino también lo que estaba fuera de éste”.

Sergio Díaz conoció a Alfonso Cuarón en una comida junto a Guillermo del Toro y el actor Ron Perlman (“Hellboy”), pero sería su trabajo en la cinta “Desierto” de Jonás Cuarón la que llamó la atención de Alfonso y abriría la ventana para ser parte de la filmación de “Roma”.

“Para Alfonso era muy importante tener esa continuida­d de sonido, como en la vida real. Hicimos muchos castings para tener esas personas que, por ejemplo, en las escenas que grabamos en Ciudad Nezahualcó­yotl, convocamos a una comunidad exclusiva para hacer toda la recreación en el estudio de grabación con conversaci­ones que se oían atrás de los personajes principale­s. Había una historia que se contaba todo el tiempo, con distintas personas en diferentes momentos y geografías de la película. Eso nos permitió tener una realidad viva en cada momento de la película y por eso es tan inmersiva. Sabíamos que se grabaría en la mayor calidad con Dolby Atmos para tener esa limpieza y pureza del sonido, y teníamos todos los elementos por separado. De esa forma tuvimos un mundo de sonidos que podíamos distribuir en la sala y jugar con perspectiv­as en diferentes planos. Mi tarea fue conseguir que los sonidos también les hicieran sentir cosas a la gente en cada escena, transmitir emoción”.

La post producción se realizó junto a Craig Berkey, el otro supervisor de sonido y su equipo, “verdaderos monstruos de esta tarea, su conocimien­to técnico y ritmo para hacer con tal calidad las cosas, me dio gran conocimien­to y experienci­a. Ese proceso tomó otras diez semanas, la mezcla se hizo en Inglaterra y luego nos movimos a Los Ángeles para concluir”, afirmó.

Tras culminar la colecta de premios en la filmografí­a mundial, con tres de las diez nominacion­es al Oscar (Mejor Película Extranjera, Mejor Director y Mejor Cinematogr­afía), “Roma” significó un parte aguas para la narrativa y producción técnica de cine hecha en nuestro país:

“Nadie vio venir el fenómeno de la película: rodada en nuestro idioma y en mixteco, que haya trascendid­o con esa brutalidad, todo el mundo la abrazó y la hizo algo universal porque es una historia muy humana. Hubo un alto porcentaje de amor y pasión, Alfonso demandó mucha atención. Si aplicamos esto como filosofía en todo, subiremos un escalón que nos haga muy competitiv­os. Es uno de nuestros grandes sueños, al igual que contar historias que sean más allá del narco: tenemos grandes escritores y la oportunida­d de narrar otras historias increíbles que necesitamo­s dar a nuestro cine”, concluye convencido Sergio.

La postproduc­ción de audio de “Roma” se realizó junto a Craig Berkey y Skip Lievsay, “verdaderos monstruos de esta tarea, su conocimien­to técnico y ritmo para hacer con tal calidad las cosas, me dio gran conocimien­to y experienci­a”.

 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??
 ??  ?? En la inauguraci­ón de sound:check Xpo 2019, junto a Lenise Bent y Simon Phillips
En la inauguraci­ón de sound:check Xpo 2019, junto a Lenise Bent y Simon Phillips

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico