Cambia, todo cambia*
Llevamos ya cuatro meses de efervescencia política. En el Congreso local, muchísimos diputado (as) quieren ser el número uno. Y se saltan todas las trancas del corralito impuesto por doña Betty Milland, jefa de la JUCOPO. Ahí tiene usted el caso de la diputada por Huimanguillo Karla Rabelo Estrada.
Sueltan de su juvenil pecho todas esas emociones contenidas en 89 años de dominio priista. Se sienten aires libertarios que hacía muchos años no sentíamos.
Ello quiere decir que en breve tiempo surgirán nuevos líderes sociales. Tabasco los necesita para sustituir su ya anquilosada e ineficiente subcultura del PRI.
En los municipios también hay movimientos de reivindicación muy importantes. En Macuspana, el presidente Roberto Villalpando encontró un verdadero desmadre en su municipio. El saqueo que dejaron
Víctor Valerio y Cuco Rovirosa es como para reescribir la “Triste historia de la cándida Eréndira y su abuela desalmada”.
Macuspana fue despedazada por depredadores que el sistema no quiere castigar. Lo mismo está pasando con Armando Beltrán en Cárdenas. Las huestes del ex alcalde, Rafael Acosta León, se llevaron desde lámparas, sillas, escritorios, aires acondicionados, cerros de papel sanitario y hasta los “cagaderos”. Tiene Armando 60 días para proceder en contra de su rata antecesor. En Villahermosa igual. El alcalde Evaristo Hernández está sentado en una bomba de tiempo. Más de cuatro mil metros cúbicos de lodo y mierda en el sistema de agua potable municipal lo mantienen en el filo de la navaja. Nunca pensamos que un chavo como Gerardo Gaudiano fuera a poner en riesgo la vida de más de 700 mil habitantes.
Pudo provocar una pandemia. Alternativamente, periodistas y reporteros de toda procedencia están sustituyendo mediáticamente, la labor de los medios masivos impresos y electrónicos. Con un teléfono celular, estos compañeros usan con gran eficiencia las redes sociales. Digamos que se están graduando en la Universidad de la calle al puro fragor de la revolución…
*Mercedes Sosa.