Ladridos, en redes
La Perra Brava feliz con Gina Trujillo como vocera del químico Granier, del PRI, tuvo que reconocer que Jorge Elías Dagdug, en Huimanguillo, por el PVEM, y Yoli Osuna, en Centro, por Morena, pusieron el ejemplo de lo que deben ser las campañas política en tiempos del covid. El Yedai (por las siglas, JEDI, del candidato) no sólo ganó la salida a todos los candidatos de todos los colores, en todo el estado, al iniciar campaña al comenzar el lunes 19, a la cero horas, sino que lo hizo en forma virtual, por las benditas redes sociales (Facebook). Con el mayor raiting.
En un proceso en que las mismas autoridades electorales tienen que vigilar las normas de seguridad en salud pública, por la nueva ola de covid, Jorge Elías Dagdug Iparrea arrancó bien su campaña en redes, el sitio en que se buscará con mayor éxito el voto ciudadano.
Y no sólo les ganó en tiempo sino que la transmisión de su arranque de campaña probó que tuvo mayor alcance: más de 1.600 personas que esa medianoche del domingo y primeros minutos del lunes estuvieron pendientes de la emisión cibernética.
Morena, en pleno día. Sólo tuvo un alcance de 415 vistos y el PRD 328, lo que debe tomarse como una señal de los nuevos tiempos.
El Yedai y PVEM, además continuaron el lunes con visitas y recorridos del candidato, en lo que será una tónica de campaña para evitar concentraciones de gente y contagios de la pandemia.
Esto se vio, también, en el acto de inicio de campaña de la candidata de Morena a la alcaldía de Centro, Yolanda Osuna. Con poca gente arrancó. La victoria, sabe, será en las urnas. No en acarreos irresponsables de ciudadanos.
Por cierto, lamebotas de Jesús Alí anda ladrando que el visconde se integrará a la campaña de Yoli porque ella, honorable, va a ganar la presidencia y la van a quitar para ponerlo a él. Si chucha, dijo la chocha.
La campaña virtual la defiende la PB, porque así el químico Andrés Granier, del PRI, estará más seguro desde las redes que andando esos caminos de Tabasco, con estos soles de abril y mayo que harán adelgazar —a menos que recurra al Submarino— al cómico Andrade, del PRD.