Fluye y divierte
“C ómo te ven, te tratan” es un pensamiento popular, políticamente incorrecto, pero tristemente realista.
Y es que los juicios de valor sobre el aspecto se hacen al momento. No por nada la proliferación de redes visuales como Instagram y Facebook, el culto al selfie perfecto. Llega una cinta que habla sobre este tema: Sexy por Accidente.
Renee (Amy Schumer) es una treintañera que trabaja en una elegante línea de cosméticos, pero en una posición poco prominente. Su oficina, en un sótano de Chinatown, Manhattan, consiste en vigilar el tráfico hacia la página web.
Sin embargo, lo que más agobia a Renee es su aspecto: tienda a la que va, le hacen ver que no tienen su talla grande, que su pie es demasiado ancho; en suma, que es una mujer gordita y poco agraciada... y que eso la limita, en todos los aspectos de su vida.
Esta comedia tiene atinos y desaciertos, pero los primeros son más que los segundos.
La principal ventaja está en la actuación de Schumer, que aquí nos brinda una mujer simpática y vulnerable que, a diferencia de su papel de Esta Chica es un Desastre, no se percibe vulgar y agresiva.
Hay mucha más empatía con el personaje, que se enfrenta a las inseguridades con las que lidiamos todas las mujeres.
Otra gran ventaja es Michelle Williams, quien interpreta a la CEO de la compañía de cosméticos, Avery Leclaire. Es una verdadera delicia su presencia y demuestra un enorme don para la comedia.
La historia tiene un toque de originalidad que permea durante las dos terceras partes de la cinta, misma que fluye muy bien, con muchos diálogos y situaciones divertidas.
Lo malo es que la frescura con la que se presenta la premisa no se sostiene y se diluye al final, para presentar los típicos mensajes aleccionadores: el valor de la amistad, lo fugaz de la belleza física y demás.pero eso no quita que salgamos entretenidos y sonrientes... el empoderamiento, es el más sexy de los pensamientos.