Vanguardia

INCERTIDUM­BRE EN AZULEJOS

PROBABLEME­NTE BAUTISTA Y ENCARNACIO­N PARTICIPAR­ON EN SU ÚLTIMO PARTIDO COMO COMPAÑEROS DE EQUIPO EN LOS AZULEJOS AL CONVERTIRS­E LA PRÓXIMA TEMPORADA EN AGENTES LIBRES

- Lasmayores.com Lasmayores.com

TORONTO.- La temporada de los Azulejos de Toronto terminó después ser eliminados en cinco partidos por Cleveland en la serie de campeonato de la Liga Americana, y quizás también haya culminado la era de José Bautista y Edwin Encarnació­n como bujías del equipo.

Durante años, los toleteros dominicano­s fueron los pilares de la alineación de los Azulejos. Sin embargo, ambos están previstos a convertirs­e agentes libres cuando termine la temporada y no está claro si es que aceptarán otro contrato o probarán como les va en el mercado de la agencia libre.

Bautista ni Encarnació­n quisieron hablar sobre sus planes futuros luego del partido.

“No quiero que esto acapare la atención”, dijo Bautista. “Realmente siento que no estoy preparado mentalment­e para hablar sobre eso. Obviamente sé que es una responsabi­lidad, pero veremos qué pasa”.

Encarnació­n, de 33 años, viene de otra gran temporada con 42 cuadrangul­ares, 127 remolcadas y un promedio de bateo de .263. Bautista, de 36 años, tuvo algunas lesiones este año y terminó con 22 cuadrangul­ares, 69 impulsadas y un promedio de .234.

Bautista conectó un doblete en la novena entrada del partido ante Indios, que Toronto perdió 3-0, el miércoles mientras Encarnació­n se ponchó en el mismo episodio. Los hinchas estaban de pie coreando sus nombres durante ambos turnos.

El año pasado, ambos jugadores jugaron un gran papel en el regreso de la franquicia a la prominenci­a.

“Creo que ellos realmente ayudaron a poner a este equipo de nuevo en el mapa, eso es lo que ellos lograron”, dijo el mánager de los Azulejos, John Gibbons. “Y realmente ambos lograron su reputación aquí en Toronto. Pero el béisbol sigue siendo un negocio”.

“Así es este deporte, pero sigue siendo un gran negocio y los jugadores tienen el derecho de probar como agentes libres. A ambos les encanta estar aquí, pero sigue siendo un negocio”, agregó.

Los Azulejos ganaron el título de la División del Este en el 2015, por primera vez en 22 años, y Bautista conectó un cuadrangul­ar clave - con todo y un épico lanzamient­o del bate para llevar a Toronto a superar a Texas en la primera ronda.

Los Azulejos luego perdieron ante los Reales de Kansas City en la serie de campeonato de la Americana.

Este año, Toronto regresó a la serie de campeonato, despachand­o a Baltimore en el partido del wild card gracias a un jonrón de Encarnació­n en el último turno, y luego barriendo a los Rangers en tres partidos.

Pero el equipo bien balanceado de Cleveland demostró ser demasiado para el plantel canadiense.

La próxima y 127 remolcadas bateo Encarnació­n en la temporada. camada de agentes libres está considerad­a más débil de lo normal así que ambos jugadores tienen buenas probabilid­ades de conseguir lucrativos contratos de varios años.

No está claro si es que el presidente del equipo Mark Shapiro y el gerente general Ross Atkins están interesado­s en tenerlos de nuevo al precio que probableme­nte costarán.

“Si es que no estoy con ellos de nuevo, tengo buenos recuerdos, independie­ntemente de lo que hicieron en el campo, son dos tremendas personas”, dijo Gibbons. “Pasamos bastante tiempo juntos, yo y por supuesto el personal de entrenamie­nto y todos los demás”.

“Estoy orgulloso de esos chicos y espero que regresen”.

En el 2011, Bautista firmó un contrato de cinco años por 65 millones de dólares y el equipo utilizó una opción de 14 millones para esta temporada. Encarnació­n, que en el 2012 firmó una extensión de tres años valorizada en 29 millones, acaba de jugar con una opción del equipo

por 10 millones. 22 vuela cercas y un promedio de .234 tuvo Bautista en el año. TORONTO.- La última vez que uno de los hermanos Alomar celebró con champán en un clubhouse del estadio conocido ahora como el Rogers Centre (el Skydome anteriorme­nte) fue el 23 de octubre de 1993, cuando Roberto festejó el segundo título de Serie Mundial seguido de los Azulejos.

El miércoles, su hermano mayor Sandy Jr. estuvo en medio de los regocijos del clubhouse de visitante, después de que los Indios derrotaron a los Azulejos en la Serie de Campeonato de la Liga Americana.

Sandy, quien ha vestido el uniforme de Cleveland un total de 18 temporadas (11 como jugador y siete como instructor), es uno de las figuras más emblemátic­as de la franquicia desde que fue Novato del Año con la Tribu en 1990.

“Este es un momento especial, porque llegar a una Serie Mundial no es fácil”, dijo el puertorriq­ueño, coach de primera de los Indios y quien fungiera brevemente como manager del equipo al final de la campaña del 2012.

Alomar fue el receptor titular de los Indios de la década de los 90 que ganaron cinco títulos divisional­es en forma consecutiv­a y asistieron a dos Series Mundiales, en 1995 y 1997. Sin embargo, a la Tribu se le escapó la gloria en ambas ocasiones, ya que cayó en seis juegos contra los Bravos en la primera oportunida­d y sufrió una dolorosa derrota en entradas extras del Juego 7 en la segunda ante los Marlins.

En la actualidad, Alomar funge no sólo como coach de primera de los Indios, sino también que ha sido mentor de los receptores desde hace varios años. Entre sus pupilos se encuentra el también boricua Roberto Pérez, quien se ha destacado por su defensa detrás del plato en este exitoso 2016 del equipo de Cleveland.

Ahora Alomar, hijo del ex ligamayori­sta Santos y cuyo hermano Roberto fue exaltado al Salón de la Fama de Cooperstow­n en el 2011, ve con entusiasmo las posibilida­des de la Tribu.

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