Santos buscará paz con la naturaleza
El Presidente de Colombia hizo entrega de 500 hectáreas de tierra para el programa Guardabosques
COLOMBIA.- El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, afirmó ayer que después de alcanzar una paz en la que se han silenciado los fusiles, se necesita construir la paz con la naturaleza, tras presidir un acto con comunidades indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta.
“La paz que queríamos la obtuvimos, pero la paz se construye, lo que obtuvimos fue silenciar los fusiles, ya las FARC están en zonas veredales y en los próximos meses entregarán las armas y se reintegrarán a la vida civil”, afirmó Santos en el municipio de Puerto Bello en el departamento del Cesar.
Y agregó que “ahora tenemos esa paz, pero ella nos obliga a actuar en otro frente, la paz con la naturaleza, tenemos que abrazar la naturaleza y reconciliarnos con ella”.
El jefe de Estado hizo entrega al Pueblo arhuaco de Nabusimake, capital indígena en la Sierra Nevada de Santa Marta, de las escritu- Dato. ras de 500 hectáreas de tierra para desarrollar el programa Guardabosques Corazón del Mundo.
Esta iniciativa de la comunidad arhuaca busca la preservación y recuperación de los ecosistemas, mediante acciones que permitan liberar áreas amenazadas.
Así como disminuir la presión sobre la biodiversidad, producto de la ampliación de la frontera agrícola, especialmente sobre los nacederos de agua y prevenir la expansión de los cultivos con fines ilícitos y actividades asociadas al narcotráfico e ilegalidad.
Santos aseguró que para su Gobierno es una prioridad además atender las afectaciones que se presentan en el país por el cambio climático, y expresó su preocupación porque la Sierra Nevada se está quedando sin nieve. MALASIA.- Malasia buscará sustancias tóxicas en una de las terminales del aeropuerto internacional de Kuala Lumpur después de que Kim Jong Nam, el medio hermano del líder norcoreano Kim Jong Un, fue asesinado allí con un agente nervioso la semana pasada.
El grupo involucrado en la búsqueda incluye el equipo forense de la policía, el cuerpo de bomberos y al consejo de energía atómica, informó la policía de Malasia en un comunicado el sábado.
Desde el ataque del 13 de febrero, miles de pasajeros han pasado por el aeropuerto. No había zonas cerradas al público ni se tomaron medidas de protección, aunque las autoridades anunciaron el viernes que descontaminarían las instalaciones.