Trump va contra legado ecologista de Obama
FIRMA NUEVA ORDEN EJECUTIVA En la ley del magnate eliminaría el requisito de que agencias de Gobierno consideren el impacto para el cambio climático
WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó ayer una orden ejecutiva con la que quiere empezar a desmantelar las políticas medioambientales y el legado contra el cambio climático de su predecesor en la Casa Blanca, Barack Obama.
Una pieza clave del decreto de Trump, firmado en la sede de la Agencia de Protección Medioambiental (EPA, por su sigla en inglés) en Washington, es que elimina el requisito de que las agencias del Gobierno federal consideren el impacto para el cambio climático en su toma de decisiones.
En un breve discurso antes de firmar la orden y sin hacer mención alguna sobre el cambio climático, Trump proclamó el inicio de una “nueva era” para la producción de energía en Estados Unidos y la eliminación de la “intrusión” gubernamental en el sector.
Trump declaró, asimismo, que la “guerra al carbón” ha terminado, al prometer la cancelación de regulaciones del Gobierno federal que, a su juicio, están “matando empleos” y anticipar una “nueva revolución energética”, centrada en fomentar la producción nacional.
El Gobierno de Trump defiende que su objetivo con los cambios decretados ayer es asegurar la independencia energética del país y, fundamentalmente, crear empleos.
En la ceremonia celebrada en la sede de la EPA estuvieron acompañando a Trump el jefe de esa agencia y escéptico del cambio climático, Scott Pruitt, los secretarios de Energía, Rick Perry, e Interior, Ryan Zinke, y el vicepresidente, Mike Pence.
También estuvieron presentes representantes, trabajadores y mineros de la industria del carbón, una de las más afectadas por las “regulaciones devastadoras”, en palabras de Trump, impuestas bajo el mandato de Obama.
¿Y EL ACUERDO DE PARÍS? El decreto no menciona el Acuerdo de París sobre el cambio climático que establece en el marco de las Naciones Unidas medidas para mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero y que entró en vigor a finales de 2016.
Durante la campaña electoral, Trump prometió sacar a Estados Unidos del Acuerdo de París y llegó a decir que la amenaza del cambio climático era un “invento” de China. Pero el Gobierno de Trump todavía no ha decidido si cumplirá los compromisos del Acuerdo de París. WASHINGTON.- Un grupo de senadores demócratas presentó ayer una legislación en el Congreso de EU para proteger a los inmigrantes indocumentados de malas prácticas en caso de ser detenidos y garantizarles el debido proceso, entre otros derechos.
El senador cubanoestadunidense Robert Menéndez anunció el proyecto que él mismo ha impulsado, con el objetivo de garantizar los derechos básicos de debido proceso y las protecciones para cualquier individuo detenido bajo la sospecha de una infracción migratoria.
El proyecto de ley fue copatrocinado por los senadores Kirsten Gillibrand, Cory Booker, Kamala Harris y Ron Wyden.
Muchas familias ya han sido desgarradas por las políticas de deportación masiva de la Administración (del presidente Donald) Trump y ahora existe una gran preocupación sobre la posibilidad de que ciudadanos estadounidenses y residentes legales también estén siendo detenidos por agentes del ICE e incluso deportados”, dijo Menéndez.
“No debemos soportar este maltrato”, agregó el senador respecto a las prácticas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), encargado de procesar ese tipo de casos.
“Nuestras leyes deben ser aplicadas de una manera que no socave los derechos civiles de las familias estadounidenses o inmigrantes, Robert Menéndez,
atacándolas sólo por el color de su piel”, reiteró el legislador.
DEFENSA DE VALORES
Menéndez insistió en que el Gobierno federal “tiene la responsabilidad de crear un sistema migratorio que defienda los valores” del país, razón en la que se sustenta su propuesta legislativa.
El proyecto de ley, conocido como Profiled, tiene como objetivo proteger a personas como Bernardo Medina, un ciudadano estadunidense que pasó tres días en un centro de detención de inmigrantes debido a que el ICE consideró que su “apariencia” no era estadounidense, y “sospechaban” que fuera un ciudadano mexicano que vivía ilegalmente en el país.
Más de 150 organizaciones de defensa de los derechos de Estados Unidos han respaldado esta propuesta. Según el diario The New York Times,