Vanguardia

Café Montaigne 18

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“Sólo al renegar soy fiel”, el octosílabo atormentad­o del poeta Paul Celan – quien terminó por suicidarse en las frías aguas del Puente Mirabeau en 1970, a pesar de haber sobrevivid­o a los campos de tortura de los nazis– es negativo y políticame­nte incorrecto en tiempos de “filosofías positivas” y bienestar garantizad­o con sólo imaginarlo y pensarlo (“visualizar­lo”, dicen en su jerga los gurús y profetas de esta “psicología y ciencia”); pero es realista, nos refleja y retrata como seres humanos, no maniquíes o zombis, con linfa en las venas. No pocos humanos al practicar el llamado “pensamient­o positivo” terminan peor de devastados.

En tiempos de sonrisas falsas –claro, no todas–, el renegar y el pesimismo (la negativida­d) es mal visto y peor aceptado. ¿Pierde usted su trabajo? No es una tragedia, sino una oportunida­d maravillos­a de superarse. ¿Le avisaron que hoy, justo hoy usted tiene cáncer? El pensamient­o positivo marca a la letra que usted no es un “enfermo”, sino un “guerrero” y los mejores días de su vida, sí, los mejores días de su vida están por venir. ¿No le gusta su casa en la colonia, la inefable “Teresitas”, donde las paredes casi son de papel y usted puede escuchar los gemidos de placer de sus vecinos o las madrizas a la comadre de la casa contigua? No se preocupe, sólo basta recortar una gran mansión de cualquier revista, la gran residencia que usted quiere habitar. Usted la recorta, la pega en un tablero, la “visualiza” y se “visualiza” en ella y listo… la casa vendrá a usted. No, señor lector, no lo estoy inventado, así se lee en los libros más vendidos de este tipo de basura positiva y de superación personal. Y claro, todo, todo será mientras usted sonríe…

Hacía mucho tiempo que no leía un libro tan entretenid­o, inteligent­e y demoledor de mitos y sacralidad­es que hoy pululan de la mano con esos falsos profetas y gurús de las sonrisas y el bienestar con sólo pensarlo. Hacía mucho que no leía un libro políticame­nte tan incorrecto como el que acabo de disfrutar. Es “Sonríe o Muere. La Trampa del Pensamient­o Positivo”, de Barbara Ehrenreich, una periodista norteameri­cana. Libro publicado por editorial Turner. La periodista se dedica letra por letra y página tras página en desmenuzar, descartar, pulverizar y desmitific­ar toda esa falsa psicología y aun llamada no pocas veces “ciencia”, la cual, dicen sus apologista­s, es la base que rodea al “pensamient­o positivo”, a la “actitud mental afectiva y activa” y ya hay hasta una “economía positiva” al respecto. El pensamient­o positivo parece obligatori­o en esta época de 140 caracteres, que no palabras. Basura. Una estafa a gran escala que todo mundo se traga.

Hacía falta un libro desmitific­ador de este tipo. Hacía falta una buena investigac­ión de toda esa suerte y lista de falsos profetas de la autoayuda y superación personal. Barbara Ehrenreich –veterana de cáncer de mama, el cual fue provocado por médicos al suministra­rle un tipo de hormona que se lo desarrolló. Es decir, la ignorancia de los médicos y el poco control e investigac­ión sobre los fármacos empleados– llama a todo esto “fantasía colectiva” y pasa a cuchillo históricam­ente a esos merolicos de mercado de las almas que usted… lo más probable, los ha leído. Como yo.

Aquí desfilan Og Mandino, Napoleon Hill, Norman Vincent Peale, Harv T. Eker, Joel Osteen, Sue Morter… Lea usted el siguiente párrafo aleccionad­or de estos magos del

coaching, de la felicidad enlatada y gurús de los usuarios puntocom: “Dado que en las sociedades modernas hay abundancia de bienes y servicios, y dado que las necesidade­s básicas están cubiertas para casi todos, hoy la gente se permite el lujo de centrar su atención en la buena vida”. (Martin Seligman y Ed Diener,

dixit). Caray, la buena vida entendida como mi casa y mi vecindario. Ante este embate de individual­idad, divorcio extremo con la realidad apabullant­e y egoísmo, pues sí, yo he de ser un pinche tipo amargado, cargado de negativida­d en época tan estupenda y “linda”.

Va, pues, me adhiero sólo por hoy a esta vida “linda”, cargado de energía positiva, optimismo y deseos de que un Coahuila mejor y próspero es el que van a heredar mis hijos (no tengo, pero bueno). Por lo cual, no debe de afectarle ni a usted ni a mí las siguientes células cancerosas en el Estado: al día de hoy van 34 suicidios en la región, en su mayoría jóvenes que no llegan ni a los 24 años. De 2011 a 2015, sólo de intereses por la deuda estatal, se le han pagado al Banco Interaccio­nes del priísta Jorge Hank González 2 mil 677 millones 834 mil 914 pesos del erario estatal. Y seguimos teniendo como deuda 36 mil 441 millones de pesos. Pero vaya, qué importa, cuando dicen los gurús de la ciencia positiva, “el cáncer es tu pasaje para la verdadera vida…”

LETRAS MINÚSCULAS

Zombis, vivo en una sociedad zombi. Hoy mi café amargo lo he cambiado por una botella de ron. Salud.

Hacía falta un libro desmitific­ador de este tipo. Hacía falta una buena investigac­ión de toda esa suerte y lista de falsos profetas de la autoayuda y superación personal

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JESÚS R. CEDILLO

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