Los ‘verdes’ tienen vida de lujos e iniciativas polémicas
| Expertos coinciden en que el PVEM se ocupa más en política que en buenas propuestas ecológicas
El PVEM no ha apoyado iniciativas que correspondan a su objetivo, el ejemplo más grave es la [iniciativa de la] Ley de Biodiversidad”.
CDMX.-“A favor del dictamen”. Los siete senadores del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) votaron a favor de la reforma energética, en diciembre de 2013.
Ninguno de ellos se opuso, a pesar de los posibles impactos ambientales y sociales “resultado de la generación y el uso de energía”, señalados por el Centro Mexicano del Derecho Ambiental (Cemda).
Un año y siete meses más tarde, el PVEM levantó como trofeo la ley que prohibía el uso de fauna silvestre en los circos.
Como resultado, muchos animales que formaban parte del espectáculo, fueron abandonados y/o murieron.
Eduardo Lino, abogado ambientalista de Gente por la Defensa Animal (Gepda).
En marzo del 2017, el tema siguiente fue los bosques, a través de la Ley de Desarrollo Forestal Sustentable.
El Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible alertó sobre posibles retrocesos en derechos humanos, participación y transparencia.
Luego vino la Ley General de la Biodiversidad, presentada por la senadora del PVEM, Ninfa Salinas. Organizaciones ambientales como Greenpeace advirtieron el posible despojo de recursos naturales.
Las anteriores son algunas acciones legislativas que, según organizaciones ambientalistas, pueden considerarse como “antiverdes”, y que han sido impulsadas por los pevemistas durante la administración del presidente Enrique Peña Nieto.
PURO DISCURSO
Al respecto, ONG’S consultadas acusan que dichas iniciativas del PVEM responden a intereses distantes de la agenda ambiental, por lo que muestran su preocupación en el tema.
En contraste, estos legisladores federales, de acuerdo con documentos obtenidos vía Transparencia por El Universal han erogado 228 millones 787 mil 666 pesos del 2011 a 2017.
Entre estos se cuentan gastos en publicidad, vehículos, ropa, despensa, comidas en restaurantes, viáticos, consultorías políticas, servicios jurídicos, seguridad privada y salones para eventos. El más alto es por telefonía celular con 73 millones 584 mil 800 pesos.
“Han impulsado una legislación controvertida. Se quedan cortas las iniciativas. Tienen esta visión de tener curules, de tener una bancada pero sin trayectoria ambiental.
“Es lamentable porque sería útil para México tener una representación en política ambiental”, señala en entrevista el director de Greenpeace México, Gustavo Ampugnani.
Asimismo, el presidente del Colegio de Biólogos, Raúl Arriaga, advierte que “hablan de residuos, vida silvestre, de muchas cosas, pero no tienen científicos.
“Los líderes y personajes que ahí se han desarrollado son ajenos al tema ambiental, entonces sus iniciativas responden a otros intereses”, expresó.
Hasta la noche de este lunes, ni el representante parlamentario del PVEM, Jesús Sesma Suárez, ni el coordinador del partido en el Senado y vocero nacional, Carlos Alberto Puente Salas, se pronunciaron al respecto. El Universal