Incorporarán a 2 mil 500 al programa ‘65 y Más’
PARA EL SIGUIENTE SEMESTRE La última ocasión que depuraron el padrón fue en 2016; detectaron que más de 2 mil personas ya habían fallecido
La última vez que se realizó la depuración del padrón de beneficiarios de Sedesol fue el año pasado. De acuerdo con el delegado federal de la Secretaría, Joel Nochebuena, se encontró que alrededor de 2 mil 500 personas ya habían fallecido, por lo que se dieron de baja del programa.
El delegado explicó que será para el próximo bimestre cuando se incorporen 2 mil 500 personas que están en lista de espera.
“Estamos esperando que México nos los autorice, yo debo de suponer que para el siguiente semestre habrá gente incorporada. De entrada, son alrededor de 2 mil 500 la gente que ingresará porque esa es la parte identificada que por defunción ya no pudo hacer supervivencia. Los invitamos para que vengan a Sedesol”, explicó.
VANGUARDIA publicó que los trabajadores de Sedesol visitarán, a partir de agosto los domicilios de cada uno de los 97 mil adultos mayores que son beneficiarios del programa 65 y Más, para cerciorarse que aún siguen con vida, según anunció el subdelegado de la dependencia federal, Bernardo Flores. Estas visitas se harán 2 veces al año.
David Tovar, coordinador del programa 65 y Más en el Estado explicó cómo funcionará la nueva estrategia. Aunque el subdelegado anunció que comenzarían las visitas en agosto, Tovar comentó que todavía no hay una fecha definida, pues continúan con la organización de los trabajadores y cómo estarán distribuidos. El coordinador del programa informó que las visitas que harán los trabajadores de Sedesol no serán exclusivamente para revisar la supervivencia de los beneficiarios, sino que se pretende dar una atención personalizada los adultos mayores.
Respecto a la supervivencia, explicó, anteriormente los adultos mayores debían acudir bimestralmente a cada una de las ventanillas de atención para poner su firma. Cuando los beneficiarios o sus representantes dejaban de ir durante tres bimestres, el pago se suspendía hasta que el adulto mayor fuera a reclamar cheque, en caso de que siguiera con vida.