PIDE JAVIER DUARTE SER EXTRADITADO HACIA MÉXICO
ES ACUSADO DE TRÁFICO DE INFLUENCIAS La decisión del exgobernador supone un cambio en su estrategia para retrasar su llegada Las acusaciones contra mí son infundadas, ligeras, vagas e imprecisas”,
GUATEMALA.-“LAS acusaciones contra mí son infundadas, ligeras, vagas e imprecisas”, dijo el exgobernador de Veracruz, Javier Duarte, ante el juez durante la segunda audiencia en Guatemala.
“Es por ello que solicito no allanarme y por tanto la extradición a mi país para hacer frente a las acusaciones”, anunció ante el juez y las cámaras de televisión.
Después de escuchar durante media hora las acusaciones en su contra —que van desde peculado a tráfico de influencias— el exgobernador tomó la palabra y anunció su intención de presentarse cuanto antes ante la justicia mexicana por las “irrisorias” acusaciones.
“Se trata de una falta de respeto a las autoridades aquí presentes (...) no perdamos más tiempo y deseo pedir la extradición”, sentenció.
La fiscal detalló que aún queda un último trámite que deberá cumplirse el próximo martes, 4 de julio, durante una nueva audiencia pública, por lo que podría retrasarse algunos días su extradición, que ya fue aprobada por el juez.
Durante la sesión de este martes, a la que fue convocado para darle a conocer los cargos que le imputa el Gobierno de Veracruz, Duarte empleó siete minutos en revelar sus intenciones y, de paso, la que será su estrategia de defensa ante las acusaciones de un “Gobierno fallido”: “Es irrisorio acusarme de tráfico de influencias cuando ya no era servidor público” dijo o por “transferir 220 millones de pesos de una cuenta del Estado a otra cuenta del Estado, por lo que no hubo extracción del dinero público” se defendió ante el juez.
La decisión de Javier Duarte supone un cambio en la estrategia de retrasar lo más posible su llegada a México donde le espera un largo rosario de acusaciones de la PGR.
Se le imputa el saqueo de 253 millones de pesos de los fondos públicos de las secretarías de Salud y Educación. Una fortuna que, después Javier Duarte, de un complejo proceso de blanqueo, usó para asegurarse la vejez con la compra de inmuebles de lujo, entre ellos dos casas en Lomas de Chapultepec (Ciudad de México) y un rancho de diseño en la exclusiva zona de Valle de Bravo (Estado de México)
Mientras la fiscal Karina Bolaños leía los delitos, Duarte interrumpía hablando con su abogado, susurrando y o haciendo precisiones en voz baja hasta que el juez le obligó a guardar silencio en espera de su turno de palabra.
Durante ese tiempo, la fiscal relató que Duarte sacó de cuentas públicas 220 millones de pesos de un fondo previsto para llevar agua potable y mejoras en el alcantarillado en las zonas rurales de Veracruz, relató.