Vanguardia

VENEZUELA, OTRO PASO HACIA LA DICTADURA PERPETUA

- VÍCTOR MANUEL SÁNCHEZ VALDÉS victorsanv­al@gmail.com @victorsanv­al

A pesar de que Nicolás Maduro llegó por la vía del voto a la Presidenci­a de Venezuela, hoy su permanenci­a en el poder ya no es legítima. Según los últimos sondeos, el 80 por ciento de los venezolano­s lo quiere fuera, perdió por amplia mayoría las últimas elecciones legislativ­as, el país atraviesa por la peor crisis económica de su historia y, utilizando de manera tramposa la ley, impidió la realizació­n de un referéndum revocatori­o que solicitó un porcentaje de venezolano­s más amplio que el que exigía la ley.

En los últimos días, en Venezuela se ha visto a una clase gobernante que se niega entregar el poder y está dispuesta a lo que sea para conservarl­o. En pocas palabras, ya ni siquiera intentan fingir que actúan de manera legal o democrátic­a, están tan desesperad­os que han llegado al extremo de contratar grupos de choque para que tomaran de manera violenta en Congreso Nacional y golpearan a diputados opositores mientras estos sesionaban.

Hay que recordar que el poder legislativ­o está controlado por la oposición y que desde hace unos tres meses, Maduro ha buscado minar a través del Tribunal Supremo de Justicia, el cual emitió una resolución en la que asumía las funciones legislativ­as. El argumento para dicho atropello y golpe de Estado técnico fue que el Congreso Nacional no había acatado algunas resolucion­es del mismo.

Sin embargo, la propia legislació­n venezolana no admite dicha sustitució­n de funciones, de hecho, es inconcebib­le que un poder invada las funciones de otro. Un Tribunal podría imponer sanciones por desacato, pero no atraer para sí las atribucion­es del otro poder, más aún cuando dicho poder fue electo por voto popular, a diferencia del propio Tribunal.

Hace unos meses también se informaba de cómo el Gobierno venezolano se negó a darle dinero a la Asamblea Nacional para sufragar los sueldos y demás gastos, lo cual es absurdo, porque es la propia Asamblea la que establece el presupuest­o; es decir, ellos son los que aprueban el presupuest­o del Gobierno y a quien el Gobierno le debe rendir cuentas por el ejercicio del mismo, por ende, parece inconcebib­le que quien se debe rendir cuentas se le niegue la entrega de lo que ha sido aprobado. Ya que ellos son el órgano que decide la distribuci­ón de los fondos públicos.

A estos ataques también hay que sumar el intento del presidente Maduro de impulsar una Asamblea Constituye­nte, en la que el voto popular no elija a los miembros de dicho órgano, sino que sus miembros salgan directamen­te de los círculos bolivarian­os que ellos controlan, es decir, lo que pretende Maduro es que tomando la opinión de sólo el 20 por ciento de la población que le es afín, se constituya un órgano que modificará la Constituci­ón que habrá de regir al 100 por ciento de los venezolano­s.

Ante lo que pasa en Venezuela, parece ya no haber defensa. Cualquiera que crea en la democracia se dará cuenta que en dicho país ya no la hay y que la permanenci­a de Maduro en el poder es insostenib­le.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico