MÁS DISTURBIOS EN PENAL; YA SUMAN 17 MUERTOS
ONU EXIGE ACLARAR EL HECHO Investigan a 54 reos como presuntos responsables del amotinamiento, así como de lesiones a otros presos y a policías
MONTERREY.- La cifra de muertos por los disturbios en el penal de Cadereyta ascendió a 17 luego de que la Procuraduría General de Justicia confirmó la muerte de uno de los reos que se encontraba internado en el Hospital Universitario.
Se han identificado 13 de los cuerpos, y permanecen 36 heridos reportados fuera de peligro, informó el Gobierno de Nuevo León.
Aldo Fasci Zuazua, vocero de Seguridad, y el procurador de Justicia, Bernardo González Garza, indicaron que 54 internos están siendo investigados como presuntos responsables del amotinamiento, así como de lesiones a otros presos y a la policía.
Sin embargo, las cifra oficial no ha convencido a los familiares de los internos, quienes acusan que hubo más fallecidos por la gran cantidad de detonaciones de arma que se escucharon y acusaron que las autoridades no les han permitido ver a sus parientes o por lo menos hablar por teléfono con ellos, a diferencia del motín anterior en el que se adelantó la visita.
FAMILIARES ENFRENTAN A POLICÍAS
La incertidumbre de no saber la suerte de los presos hizo que este miércoles se presentaran varios conatos de violencia cuando un grupo de familiares, principalmente mujeres, pretendió forzar la entrada del portón de acceso al reclusorio y fue repelido con gases lacrimógenos por la Fuerza Civil que custodia el inmueble.
Este miércoles, las autoridades dieron a conocer en conferencia la lista de reos fallecidos y, simultáneamente, en el centro de reclusión personal de Fuerza Civil y de la Comisión Estatal de Derechos Humanos proporcionó la misma información a los familiares presentes.
El vocero de Seguridad y el procurador estatal aseveraron que de los fallecidos, 11 eran secuestradores y miembros del crimen organizado; de los muertos, además cinco estaban procesados por otros delitos graves.
‘NO SE VIOLARON LOS DH’ Aldo Fasci rechazó que los policías hayan incurrido en violaciones a los derechos humanos por haber utilizado armas de fuego y abatir a al menos dos internos, pues argumentó que evitaron la muerte de otros presos y tres custodios que estaban retenidos.
“Se tomaron las medidas que se tenían que tomar. Estamos abiertos a que las organizaciones de Derechos Humanos y la Comisión Estatal, incluso la Comisión Nacional (de Derechos Humanos), nos acompañen en todo este procedimiento”, afirmó.
Hasta la noche de este miércoles, el director del penal de Cadereyta, Edgardo Aguilar Aranda, acusado (en mantas) durante los disturbios de provocar el motín por apoyar a un grupo delictivo, ha recibido total apoyo del Gobierno estatal, a diferencia de Gregoria Salazar, quien fungía como directora del penal de Topo Chico en febrero de 2016, con la matanza de 49 reos.
En tanto, la Oficina en México de las Naciones Unidas contra las Drogas y el Delito (UNODC) y la Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONUDH) hicieron un llamado a las autoridades de ese estado a conducirse en una investigación pronta que esclarezca los hechos. Con información de ABC y El Universal