Manada de candidatos
Se dice que la naturaleza democrática en los métodos de selección interna de candidatos, determina la calidad de la democracia existente en un País. El análisis de aquellos militantes que han demostrado congruencia y lealtad a las más elevadas causas de su partido. El descarte de quienes no reúnen méritos. Ese sería el factor por excelencia que distingue a los partidos políticos verdaderos de los que son solo un “membrete” que lucra, o un “señuelo” diseñado para confundir a la población, pulverizando el voto ciudadano para llegar al poder y ejercerlo sin un gramo de decencia.
Nada de esto refleja “el dedazo”, o ser secretario del comité directivo nacional del PAN, Ricardo Anaya, vivir de ello y auto promocionarse hacia Los Pinos utilizando una escalera hecha de traición en cada peldaño. Morena empezó como marca: “Movimiento de Regeneración Nacional”, con AMLO como núcleo desde el principio en torno a quien se fueron sumando. Su proyecto ha resultado interesante y cuenta con buenos asesores. Esperamos que al sumar siendo incluyente, también sepa restar.
El juego del presidente Peña y su INE es una intención perversa de llenar el corral en tiempo récord, a toda una manada flaca de méritos que se auto nombran “candidatos independientes a la Presidencia de la República”, 85 hasta ayer. A los electores nos resulta imposible realizar una selección informada entre todos ellos. Se necesitan filtros finos, los partidos políticos podrían ser esos filtros mediante elección interna después de haberlos investigado bien y haber verificado su comportamiento ciudadanos y como militantes.
En las elecciones del 2018 donde se juega el destino de 222 millones de mexicanos, saqueados por todos los colores partidistas, introducen un distractor parecido al de “los 15 años de Rubí”. Es con distractores como convierten en imbéciles a los que deben estar atentos a lo que sucede en su País.
Ningún partido político muestra tener verdadera ideología. Ninguno se responsabiliza por los actos corruptos que hacen sus candidatos: antes, durante y después de las elecciones. El “ganador” se basa en su lista de “contactos” para convertirlos en miembros del gabinete. Están convencidos que la simulación basta para vivir en la impunidad, porque en México no hay rendición de cuentas ni contrapesos reales. Ya basta de que nuestro México signifique solo un botín.
Ya es hora de tener en la Presidencia de la República a verdaderos estadistas con visión de país y trayectoria política, perfil personal y profesional. Conciencia de lo que significa ser Servidor Público (con mayúscula). Estamos ante unas elecciones donde la manada en estampida corrió a registrarse como independientes, sin ningún respeto hacia los ciudadanos.
¡Decídete a ser feliz hoy!