Ordenan al cuarto obispo en la historia de Torreón
Líder religioso encabeza desde ayer la Diócesis local
Monseñor Luis Martín Barraza se convirtió en el cuarto obispo de la diócesis de Torreón; dijo que pondrá en práctica las palabras del Papa respecto a profesar una Iglesia al servicio de la sociedad y no solo a darle mantenimiento.
Barraza Beltrán releva al obispo José Guadalupe Galván y proviene #OBISPO de la rectoría del Seminario de la Arquidiócesis de Chihuahua.
En rueda de prensa previa a la celebración de la Ordenación Episcopal, Monseñor Barraza reflexionó sobre su función de poner a la comunidad cristiana de Torreón al servicio de la sociedad.
Refirió que necesita vivir en la ciudad antes de dar un diagnóstico sobre la diócesis. “La realidad antes que la idea”, dijo parafraseando al papa Francisco.
Luis Martín Barraza comentó la necesidad de hacer camino en el evangelio para contribuir a construir la familia de la diócesis y de la sociedad.
“Como dice el Papa, los prefiero golpeados y raspados por estar en la calle. Hay que poner la Iglesia al servicio de la sociedad, necesitamos gente que se la juegue por el evangelio de Jesucristo”, refirió.
Con la presencia del Nuncio Apostólico en México, Franco Coppola, Barraza Beltrán expuso que el tema de las vocaciones para el seminario son fruto de familias cristianas y vida de parroquias. Sobre la escasez de estas vocaciones apuntó: “Hay que cuestionar de qué está hecha esa membresía que no alcanza a generar vocaciones, apóstoles comprometidos”. TIENE IGLESIA 50 AÑOS DE ATRASO Franco Coppola, el Nuncio Apostólico en México, refirió que la Iglesia lleva 50 años de atraso esencialmente porque no se puso en práctica el Concilio Vaticano Segundo.
Coppola refirió la necesidad de cambiar la forma de preparar a los sacerdotes y no se pueden seguir haciendo las cosas como hace 50 años. “La fe no, la fe es la misma, pero la formas deben cambiar”.
Dijo que existe un problema porque pese que el evangelio es el mismo, la manera de transmitirlo y de pasarlo a nuevas generaciones no ha cambiado,
El Nuncio expresó que hoy en día no se da la posibilidad a los jóvenes de desarrollar la semilla de la vocación que Dios ha puesto en su corazón y “ese es problema nuestro”, admitió. “Hay una Iglesia atrasada que da respuestas que eran válidas en el siglo pasado sin darse cuenta que el tiempo ha caminado”.
Coppola también criticó el hecho de que la sociedad apunte hacia los que hacen mal, cuando, reflexionó, son el fruto de lo que hemos hecho o no hemos hecho. “El hijo es fruto de la familia, antes de condenar a los demás hay que hacer un examen de conciencia de lo que hemos hecho o no hemos hecho”, insistió.
Sobre el escenario político del 2018, Franco Coppola refirió que no es un papel directo de la Iglesia entrar en las elecciones, pero aclaró que tiene que decir su palabra y en ese sentido orientará a los fieles.
Lamentó que no haya políticos que defiendan ser católicos y consideró que eso ha sido la falta de capacidad de la iglesia para preparar gente que defienda la doctrina de la Iglesia cómo herramienta para solucionar los males del país.