ATIENDE IMSS A ENFERMOS EN EL ¡ESTACIONAMIENTO!
Pasillos y área de urgencias son insuficientes, por lo que varios pacientes fueron encamillados a la intemperie Toda la mañana han estado llenos los pasillos. Hay gente en las sillas de espera, no hay camillas”.
Aunque son recurrentes las quejas contra el servicio que presta el área de Urgencias de la Clínica 2 del Seguro Social, el día de ayer sucedió algo insólito: el estacionamiento de ambulancias fue utilizado para atender a varios derechohabientes, a la intemperie y a pesar del frío.
Por la precupante situación, familiares de los enfermos llamaron a los medios de comunicación para que dieran fe del servicio que prestan en esa clínica.
Al arribar los reporteros de algunos medios fueron recibidos de forma agresiva por elementos de seguridad de la clínica, quienes impidieron que realizaran su labor informativa.
Además de agredir a personal de un medio de comunicación, lanzaron insultos contra paramédicos de la Cruz Roja: “Estos güeyes tienen la culpa por traer muchos pacientes”, dijeron vigilantes del lugar, lo que molestó a los usuarios.
Los mismos familiares de los enfermos pidieron a los medios de comunicación entrar al lugar y ver en qué condiciones se encuentra la clínica, e incluso a varios de los pacientes los tenían en el área donde se estacionan las ambulancias.
A simple vista se notaban el mal estado de salud de quienes se encontraban en el pasillo esperando a ser atendidos o canalizados con un especialista.
Gente que tiene familiares dentro declaró que durante toda la mañana hubo personas en los pasillos por falta de camillas.
“Toda la mañana han estado llenos los pasillos. Hay gente en las sillas de espera, no hay camillas. Estamos aquí desde bien temprano”, dijo una mujer que llevó a su enfermo.
Personal de piso aclaró que por ley están obligados a atender las emergencias y dio un mensaje de prevención a la ciudadanía para aplicarse vacunas y cuidar su estado de salud.
Al preguntar si no preveían una ampliación del área de Urgencias, respondieron que es asunto del delegado del IMSS aclarar lo anterior. ¿Urgencias? Familiares de pacientes de la Clínica 1 del IMSS, afirman que el lugar carece de instalaciones óptimas para soportar las bajas temperaturas.
Uno de los denunciantes explicó que debido a que el segundo piso del hospital no cuenta con calefacción, han tenido que soportar noches heladas mientras cuidan a sus enfermos.
Las quejas hacia el nosocomio se extendieron al afirmar que ni los directivos o encargados dan explicación alguna respecto al tema, presentando como única solución el permitirles llevar calentadores de sus propias casas.
“Ahora con el frío nos dejaron traer calentadores de nuestras casas porque el frío si estaba muy fuerte y en el área en donde está internado mi familiar no tie calefacción”, señaló otro de los quejosos. A una semana de la caída de nieve en la ciudad, Aguas de Saltillo suma casi 4 mil reportes de medidores reventados en la ciudad; ante la demanda de atención se optó por abrir cuatro líneas más de atención, alternando la canalización en redes sociales.
Con apoyo de 54 brigadas integradas por 80 personas los ciudadanos reciben atención por averiaciones en sus sistemas.
La paramunicipal tiene registro de 58 mil hogares con medidores asegurados. En el caso de personas que no están aseguradas, pueden llegar a pagar hasta 800 pesos por la reinstalación del equipo.
El plan de contingencia activado con 26 líneas sumó 4 líneas más, por lo que Agsal informó contar con 30 líneas de atención disponibles, recalcando a la ciudadanía que en caso de no recibir respuesta o estar ocupadas, establezcan contacto a través de redes sociales, medio que ha permitido canalizar atención social.
El costo por asegurar un medidor es de 150 pesos en una sola exhibición o bien 14 pesos extra cargados al recibo por mes, trabajadores informaron que esperan la ciudadanía confíe en el trabajo realizado y tome en cuenta los beneficios que implica tener asegurado su medidor.
Aguas de Saltillo informó contar con la capacidad de dar respuesta a 600 reportes de forma diaria, en promedio los brigadistas tardan 20 minutos en reparar fallas en medidores.