3. Indulto de Kuczynski a Fujimori divide a Perú, luego de que el presidente librara la destitución.
LIMA.- El jueves pasado, cuando Pedro Pablo Kuczynski (PPK) se libró de su destitución gracias a 10 imprevistos votos de fujimoristas disidentes, muchos pensaron que había un pacto para indultar al autócrata. Pero el Gobierno peruano lo negó. Sólo tres días después, la concesión del perdón presidencial a Alberto Fujimori, el hombre más odiado de Perú, desató una enorme crisis política en la que hubo manifestaciones cerca del domicilio del Presidente y acusaciones de “traición a la patria” de personas como Verónika Mendoza, líder de la izquierda y clave para el ascenso de Kuczynski al poder.
Mientras políticos y seguidores fujimoristas celebraban la decisión en las redes sociales y afuera de la clínica donde estaba su líder, miles de personas se congregaron en la plaza San Martín –del centro de la capital– para protestar contra el engaño de PPK. Unas 500 personas llegaron a la esquina de la casa de Kuczynski y la policía cargó violentamente contra ellos, en una calle cerrada el grupo más grande recibió gas lacrimógeno y varazos. Tanto en Lima como en las regiones había convocadas varias manifestaciones.
“Lo que acaba de hacer es una vil traición a la patria. A cambio de salvar su pellejo ha negociado con el fujimorismo un indulto infame al corrupto y asesino. Una vez más ha actuado como un vendepatria”, escribió la izquierdista Mendoza en las redes sociales.
GOLPE A LUCHA CONTRA LA IMPUNIDAD: AI
El indulto concedido al exmandatario Alberto Fujimori por el presidente peruano es un “duro golpe” a la lucha contra la impunidad, denunció el lunes Amnistía Internacional (AI).
Esta decisión crea “un escenario sembrado de dudas sobre la transparencia, objetividad y el respeto a las reglas del debido proceso”, detalló la organización en un boletín.