Vanguardia

¿Cómo afrontar el año con más delitos en la historia?

Se han dado pasos muy solventes en seguridad pública, pero las cifras delictivas denotan que los esfuerzos no han sido suficiente­s

-

La seguridad es uno de los puntos más sensibles en cualquier sociedad, y en Coahuila no puede ser la excepción. Durante las últimas campañas electorale­s en la entidad, una parte de la línea discursiva de los participan­tes fue cómo combatir al crimen.

En los años más recientes, en el Estado se ha sentido una bocanada de oxígeno en esta materia. Atrás quedaron los hechos estridente­s de violencia producto del crimen organizado.

Las masacres en bares, los “toques de queda” de facto que en algunas noches se llegaron a aplicar en ciertas zonas de la entidad.

La delincuenc­ia organizada marcó un parteaguas en este rubro.

Los resultados entregados en los último cinco, incluso seis años, dejan patente que la descomposi­ción social que se alcanzó era profunda.

Sin embargo, la delincuenc­ia –muy posiblemen­te no con el poder de antaño— sigue allí.

El comentario viene a cuento ante el reporte periodísti­co que presentamo­s en esta edición sobre los índices delincuenc­iales que se han alcanzado en Coahuila durante 2017.

Según las cifras proporcion­adas por el Secretaria­do Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, nunca antes se habían contabiliz­ado tantos hechos ilícitos como en estos 11 meses del año que aún está en curso.

Es cierto, gran parte de esos delitos es del fuero común, y no con la estridenci­a de antaño, pero estos hechos siguen golpeando —aunque no en la misma medida— a la sociedad.

Esta situación en materia de seguridad no puede ser vista como una responsabi­lidad de una autoridad en específico.

Las cifras debieran ser analizadas con detalle por todos —incluyendo la clase política y la sociedad— para ubicar en dónde la estrategia no se está cumpliendo como debiera, por lo que hay que reforzarla.

En esta labor, los distintos niveles de la administra­ción pública tienen responsabi­lidad, dadas las tareas que por ley tienen asignadas.

Es cierto que se han dado pasos muy solventes en materia de seguridad pública, pero las cifras delictivas recién publicadas denotan que los esfuerzos han sido plausibles, pero no suficiente­s.

Las autoridade­s que están tomando el timón, y las que en días porvenir asumen su cargo, deberán sentarse a pensar qué ha faltado, para luego ejecutarlo.

Es uno de los primeros dilemas que deberán resolver con su asunción a los distintos puestos de representa­ción popular.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico