TRIUNFO SIN MAGIA
CON GOLES DE BALE, ISCO Y MAYORAL, LOS MERENGUES SUPERARON A SU RIVAL QUE POR ALGUNOS MOMENTOS OPUSO RESISTENCIA
no reflejó el buen partido que cuajó el Numancia ni los pocos méritos que hicieron los blancos para llevarse un encuentro en el que Soria jugó con diez la última media hora por expulsión con doble amarilla de Diamanká.
Los castellanos también reclamaron un claro penal que podría haber cambiado el rumbo del juego, si el árbitro si el árbitro lo hubiera concedido.
El agarrón de Theo Hernández a Dani Nieto a la media hora de partido fue tan palmario como la pena máxima cometida por Carlos Gutiérrez sobre Lucas Vázquez cinco minutos después.
Bale, el único componente de la afamada BBC presente en Los Pajaritos, lo pateó suave a la derecha del arquero.
Más allá del tanto, el Real Madrid apenas dejó en Soria jugadas para el recuerdo. Ni Marco Asensio ni Dani Ceballos ni especialmente Theo, los hombres llamados a protagonizar el futuro blanco, brillaron como de ellos se espera.
Jugando ya con diez por la dura entrada de Diamanká a Nacho, el Numancia pudo empatar el choque con un disparo de Íñigo Pérez, desde 40 metros, que se estrelló en el palo.
El mediocentro español, uno de los mejores hombres del Numancia, vio a Kiko Casilla adelantado y no se lo pensó dos veces. El arquero blanco estaba vencido. El travesaño lo redimió.
Después, llegaron el gol de dudoso penal de Isco, que salió desde el banco para disputar los últimos 20 minutos, y del recién incorporado Mayoral, el único que hizo gala de una gran puntería.