RIESGOS Y BONDADES
Los probióticos son un grupo de bacterias ‘buenas’ que se agregan a algunos suplementos alimenticios, con elpropósito de mantener un intestino saludable.
Por lo regular su cuerpo no necesita probióticos. Usted ya tiene bacterias saludables en su intestino, pero no hace daño tomarlos y, por el contrario, agregarlos a su dieta podría diversificar su flora mirobiana, lo cual es bueno.
E incluso podría disminuir la cantidad de bacterias ‘malas’ del intestino que pueden causar enfermedades o inflamación. O reemplazar los gérmenes problemáticos con bacterias útiles.
CASOS VINCULADOS Los investigadores están estudiando cómo los probióticos podrían hacer mejor su trabajo para ayudar a las personas que padecen las siguientes disfunciones…
Diarrea. Especialmente cuando está relacionada con antibióticos específicos. Y también pueden ayudar en los casos de diarrea infecciosa, especialmente en los niños. Enfermedades inflamatorias del intestino (EII). Aquí se incluye la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa. Los probióticos pueden mantener la colitis ulcerosa en remisión (un estado de poca a nula actividad de la enfermedad) y evitar que el paciente recaiga o empeore. Síndrome del intestino irritable. Que incluye malestares estomacales, exceso de flatulencia (gases) y estreñimiento. Pero los probióticos también podrían no ser buenos para usted. Veamos.
EL LADO NEGATIVO
Debido a que las bacterias buenas ya existen en el cuerpo, se consideran seguras para la mayoría de las personas. Pero los probióticos pueden desencadenar reacciones alérgicas y causarle problemas estomacales leves; no obstante, esos síntomas por lo general desaparecen después de que su cuerpo se acostumbre a ellos. Pero asegúrese de dejar de tomarlos si tiene algún problema.
Los expertos recomiendan no tomar probióticos a las personas con un sistema inmune debilitado y las que se han sometido a una cirugía reciente.
Siempre hable con su pediatra antes de darle probióticos a su hijo, y deje de tomarlos si está embarazada o lactando.
La mayoría de los probióticos se venden como ‘suplementos dietéticos’. Eso significa que las compañías que los fabrican no tienen que contar con la aprobación oficial para venderlos, ni demostrar que son efectivos. (Selector de Vanguardia)