Tienden la mano a doña Esther
Los mil 160 pesos bimestrales que le otorga Sedesol, doña Esther los utiliza para abonar a la deuda de 14 mil pesos que tiene de predial.
La mujer vive en la más completa soledad y el dinero que recibe de la Secretaría de Desarrollo Social en ocasiones no le alcanza para comer y sólo bebe café. La madre de Berenice, una mujer bondadosa la recibe en su casa, allá en Torreón, para compartir alimentos y compañía.
“Nunca se casó, pues la amputación del seno le afectó su autestima y consideró que jamás ‘conseguiría’ pareja para hacerlo”, según palabras de Berenice.
Estudió para ejercer el secretariado pero eligió atender la panadería de los padres; el negocio terminó de funcionar conforme sus padres iban envejeciendo. A sus 64 años trabajaba como mesera para solventar las necesidades de su padre. Fue hija única. CLAMAN AYUDA
Berenice Ruiz, junto con Laura Cázares y Sandra Pineda, mujeres que apoyaron en el caso de don Ramón (aquel señor que velaba solo a su esposa en una capilla y gracias a las redes sociales decenas de saltillenses respondieron al llamado de ayuda), contactaron a VANGUARDIA para pedir apoyo a los ciudadanos y autoridades para el caso de Esther.
Están preocupadas, pues la pequeña habitación en que vive la mujer está por derrumbarse. Además temen que por desnutrición su estado de salud se vea afectado: la mujer, con el paso del tiempo ha perdido la totalidad de sus dientes y por lo que no puede comer cualquier alimento. DRAMÁTICA REALIDAD
En el boletín titulado Situación de las personas adultas mayores en México, realizado por el instituto Nacional de las Mujeres en México, señala que el 12 por ciento de las mujeres y 9.2 por ciento de los hombres adultos mayores viven en soledad en hogares unipersonales, lo cual puede significar que están en situación de vulnerabilidad ante cualquier emergencia o necesidad que no puedan satisfacer.
El Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) ha hecho público que de los más de 12 millones de adultos mayores que viven en México, el 80 por ciento lo hace en condiciones de pobreza y abandono.
Un 16 por ciento de los adultos mayores mexicanos sufre algún grado de abandono y maltrato, como golpes, ataques psicológicos, insultos o robo de sus bienes.