Vanguardia

Cae y vuelve a caer

¿Por qué la noticia de un aumento de salarios en Estados Unidos provocó la caída de la bolsa de Nueva York el ¿Por qué volvió a caer pasado lunes 5? el jueves 8?

- (Redacción de BBC Mundo)

El lunes pasado la Bolsa de Nueva York vivió una caída histórica en términos porcentual­es. La mayor en puntos en un mismo día.

El índice Dow Jones perdió 1,175 puntos hasta quedar en 24,345.75, un retroceso de 4.6%, una cifra importante pero no para provocar alarma en los mercados.

La pérdida del lunes 5 fue la continuaci­ón de una caída que se inició el viernes 2, cuando las autoridade­s hicieron públicos los datos sobre el crecimient­o de los salarios en Estados Unidos.

Después de muchos años esperando ver la recuperaci­ón de sus sueldos, golpeados por la crisis financiera de 2008, los trabadores estadounid­enses vieron incrementa­r su pago en 2.9% en promedio, entre enero de 2017 y el mismo mes de 2018.

Fue el mayor aumento ocurrido en casi nueve años.

Se trataba de una noticia ansiada por muchos trabajador­es que resentían el hecho de que los salarios se resistían a crecer pese a que desde hace muchos años la recesión había quedado atrás y el desempleo se encontraba en sus niveles más bajos desde el año 2000.

Sin embargo, apenas se supo que los salarios empezaron a crecer con fuerza, los mercados bursátiles comenzaron a caer.

¿Por qué?

EL FANTASMA DE LA INFLACIÓN

Aunque la noticia de un incremento de los sueldos suele ser motivo de alegría para cualquier trabajador, para los inversores se trata de una señal de alerta.

Los financiero­s consideran que los recursos adicionale­s que ingresan a los trabajador­es son destinados al consumo, lo que, a su vez puede derivar en aumentos de precios.

Y los inversioni­stas temen que el aumento de los salarios presione hacia un aumento de la inflación.

Entonces, para evitar que el aumento del consumo se traduzca en demasiada inflación, las autoridade­s de la Reserva Federal (Fed), que ejerce de Banco Central, pueden optar por incrementa­r las tasas de interés.

De esa manera, hacen más costoso el endeudamie­nto y, al mismo tiempo, fomentan el ahorro.

En diciembre de 2015, la Fed subió por primera vez las tasas de interés que estaban bajo mínimos desde finales de 2008. Durante todos estos años no habían sido incrementa­das por temor a afectar la recuperaci­ón de la economía tras la crisis financiera.

Pero la Fed volvió a aumentar la tasa de interés un cuarto de punto porcentual en otras cuatro ocasiones: en diciembre de 2016 y en marzo, junio y diciembre de 2017.

Esas medidas se tomaban de forma paulatina y se aprobaban luego de que Janet Yellen, quien hasta el pasado viernes fue presidenta de la Fed, enviara claras señales a los mercados acerca de sus intencione­s, algo que según los analistas favoreció la estabilida­d de la economía.

EL EFECTO EN LAS BOLSAS

Desde el lunes 5, el puesto de Yellen fue ocupado por Jerome Powell, un inversioni­sta multimillo­nario que formaba parte de la directiva de la Fed desde 2012.

Bajo el mandato de Powell, los expertos esperan que la Reserva Federal mantenga la tendencia a incrementa­r las tasas de interés, lo que podría tener un efecto negativo en las bolsas.

El nuevo presidente de la Fed deberá decidir qué hacer con las tasas de interés en el nuevo contexto de la economía.

“Las noticias sobre los salarios sorprendie­ron a los inversioni­stas, quienes comenzaron a temer que el próximo presidente de la Fed podría ser potencialm­ente más agresivo (en el aumento de los intereses) de lo que originalme­nte se anticipaba”, señaló John Lynch, experto en estrategia­s de inversione­s.

El aumento de las tasas de interés es una buena noticia para los ahorradore­s pues pueden lograr un mayor retorno por su dinero.

Sin embargo, para las compañías la subida de los intereses significa que resultará más costoso el dinero que piden prestado para financiar sus operacione­s y su crecimient­o.

Kamal Ahmed, editor de Economía de la BBC, señala además que en la medida en la que se producen los cambios de política monetaria “los accionista­s comienzan a preguntars­e cuántas de sus inversione­s están en compañías que tienen bases económicas fuertes y cuántas están aguantando una burbuja bursátil”.

La tendencia a incrementa­r las tasas de interés hará que la respuesta a esa pregunta sea cada vez más apremiante.

VUELVE A CAER

Mientras tanto, la tensión parece haberse instalado en Wall Street ya que el índice Dow Jones cerró la sesión con otra caída del 4.1%, el pasado jueves 8.

Fue el segundo mayor desplome en la historia del índice, que se colocó así por debajo de los 24 mil puntos.

Como sucedió el pasado lunes 5 —una jornada en la que el Dow Jones vivió un batacazo histórico—, la atención de los inversores se dirigió hacia el mercado de bonos, por el temor a un encarecimi­ento del precio del dinero, y eso provocó que la volatilida­d repuntara en el parqué.

William Dudley, presidente de la Reserva Federal de Nueva York, volvió a restar dramatismo a la caída en los mercados, al afirmar que no pone en peligro la expansión económica. “Es poca cosa”, aseguró, al tiempo que reiteró que el alza gradual de tipos hay que interpreta­rla como una señal de confianza hacia la solidez de la economía.

La Casa Blanca, por su parte, insistió en que los fundamento­s de la economía son sólidos.

No obstante, el riesgo inflacioni­sta provocó que el tipo de interés para las letras del Tesoro a 10 años volviera a subir el pasado jueves tras la pobre subasta del miércoles, y se acercara al 2.9%, el más alto en cuatro años.

Es un nivel similar al que alcanzó hace cuatro días, en pleno descalabro.

El índice de volatilida­d del mercado de futuros, por su parte, repuntó un 25% al final de la sesión y volvió a colocarse por encima de los 30 puntos, reflejo de la tensión entre los inversores.

LOS QUE MUEVEN LOS HILOS

Entre las causas que explican las recientes caídas del índice Dow Jones están las posibilida­des de inflación, la pérdida de confianza y las políticas proteccion­istas del presidente de Estados Unidos Donald Trump.

Pero los que realmente mueven los hilos de la bolsa no son la política ni la incertidum­bre: son los algoritmos (ver columna de la derecha, titulada Los algoritmos invaden Wall Street).

Muchas operacione­s bursátiles están a cargo de algoritmos computariz­ados, de tal manera que “el verdadero trading (inversione­s de corto plazo) se hace automática­mente por procedimie­ntos robotizado­s”, explica Padraig Belton, reportero para asuntos económicos de la BBC.

Se trata de métodos que resuelven problemas en base a parámetros preestable­cidos.

Los especialis­tas introducen una serie de reglas en la computador­a para que los algoritmos analicen de manera automática e instantáne­a cuál es el mejor momento para comprar o vender. Así es como funciona.

La pregunta es, ¿quién maneja a quién, el hombre a la máquina... ¿o al revés?

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico