MASACRE EN SAN VALENTÍN: 17 MUERTOS EN COLEGIO DE EU
Exalumno abre fuego con un AR-15 en secundaria de Parkland, Florida, y provoca una tragedia mayor que la de Columbine.
MIAMI.- Estados Unidos vivió este miércoles 14 de febrero, Día del Amor y la Amistad, la última pesadilla de su imparable cadena de masacres con armas de fuego. En la tranquila localidad de Parkland (30 mil habitantes), a una hora en coche al noroeste de Miami (Florida), un exalumno abrió fuego en la escuela secundaria Stoneman Douglas dejando un reguero de sangre y espanto con al menos 17 muertos, informó la Policía local.
Un número indeterminado de heridos fue trasladado a hospitales de la zona. La masacre supera ya a la del instituto de Columbine (1999) donde hubo 15 muertos incluyendo a los dos tiradores adolescentes, estudiantes del centro.
Las balas empezaron a resonar pasadas las 14:00 hora local. Alrededor de hora y media después el sheriff del condado de Broward, donde se encuentra Parkland, comunicó que el tirador había sido detenido y trasladado en ambulancia a un hospital. Según la agencia Associated Press, el responsable de la masacre es el joven Nicolás Cruz, de 18 años y expulsado del Stoneman Douglas.
El atacante disparó dentro y fuera del instituto con un rifle AR-15 e iba preparado con numerosos cargadores. Fue arrestado en el exterior del centro, a unos cientos de metros.
La persecución al tirador duró más de una hora. Las autoridades establecieron un perímetro de seguridad e impidieron que los familiares de estudiantes se acercaran al área de riesgo, sobrevolada por helicópteros. En las imágenes de la televisión local, decenas de estudiantes salían del instituto con las manos en alto y en fila, escoltados por agentes armados y chalecos antibalas.
Un número indeterminado de alumnos y profesores se quedaron atrapados dentro de la escuela y recibieron órdenes de la policía de atrincherarse donde estuvieran. Grabaciones del interior del centro difundidas por redes sociales mostraron escenas de pánico y gritos en medio del sonido explosivo de las ráfagas de disparos.
La Casa Blanca comunicó que el presidente Donald Trump fue informado del suceso. “Nuestras condolencias y oraciones están con los afectados”. Minutos más tarde el Mandatario reaccionó en Twitter: “Ningún niño ni profesor ni nadie más debería sentirse inseguro en una escuela estadounidense”.