Se acabaron las precampañas
La percepción colectiva se empieza a fortalecer con la noción de que la mejor decisión, a la hora de escoger quien será el próximo Presidente de la República, es olvidarnos de charlatanes y provocadores, por más tiempo que tengan en la pantalla y por mas simpáticas o graciosas que puedan parecer sus arengas, porque propuestas no tienen. Se acabaron las precampañas. Y cada vez está más claro, José Antonio Meade es la mejor carta que tiene el País para seguir en su proceso de transformación.
Al señor López se le agotan y revierten sus propias ocurrencias. Hay por ahí circulando un chiste que lo define totalmente. Al levantarse de la cama, a primera hora del día, le pregunta a uno de sus asistentes: ¿hoy vamos a favor o en contra de la Reforma Educativa?.
Su obsesión, la de López, es seguir sumando personas impresentables, que según él por ser conocidas, dado sus relevancia en algún ámbito que no tenga nada que ver con la política, como es el caso de Cuauhtémoc Blanco ó Sergio Mayer, especialista en espectáculos de desnudismo, para que basados en su supuesta fama le puedan acercar adeptos. Ya hay alguien que le sugirió sumar a todo el equipo de Cruz Azul.
Por el lado de Ricardo Anaya las cosas van un poquito peor, pero por la misma línea. Treparse a las torres de los escenarios que le montan para sus eventos. Inventar que lo está siguiendo todo el tiempo, porque de ese tamaño es su paranoia, o negarse a contestar las pruebas irrefutables de su enriquecimiento que han publicado revistas tan serias como Proceso.
Mientras tanto, José Antonio Meade, “Pepe Meade”, como ya lo llama la gente, se ocupa de explicar a empresarios, trabajadores, estudiantes, amas de casa, pensionados y todos los sectores de la población, como se le tiene que hacer para poder mantener a raya la inflación y hacer que la canasta básica, lo que comemos todos los días la gran mayoría de los mexicanos, no suba de precio, a consecuencia de los efectos de tantos factores externos que se atraviesan en nuestra economía.
Lo que Meade desea que sea el gran debate nacional es cómo le vamos a hacer, como País, para que podamos generar más empleos, para que nuestros hijos y las nuevas generaciones puedan tener oportunidades reales, cuando terminen sus estudios, o cuando decidan insertarse en el mercado laboral, para procurarse un ingreso y labrar un proyecto de vida propio.
Aquí en Coahuila tenemos muy claro lo que es el empleo. Gracias a ello tenemos en todas las familias ejemplos muy cercanos de quienes se han ido acomodando en la muy amplia planta productiva de toda la entidad, ni qué decir en esta región sureste donde todos tenemos amigos y familiares en las grandes empresas, o en todo tipo de negocios, que permiten traer prosperidad a miles de familia.
Por eso, los coahuilenses defendemos tanto estos avances en nuestra entidad. Queremos que el gran esfuerzo que está haciendo el gobernador Miguel Riquelme desde el primer día de su administración para seguir consiguiendo más fuentes de empleo para todos los municipios de la entidad, siga teniendo como hasta ahora el respaldo del gobierno federal.
“Pepe Meade” es el único de los contendientes por la Presidencia de la República que le sabe en serio al tema económico. El único que de verdad tiene conocimiento y experiencia para fortalecer la economía familiar.
Meade es el gran aliado que necesita Coahuila, y los coahuilenses, como usted y como yo, como nuestros hijos y nuestros familiares, para poder contar con este desarrollo que vemos hoy en Saltillo y en todo en nuestro Estado. Eso es lo que está en juego en la próxima elección.