Procesan a separatistas; catalanes se inconforman
BARCELONA, ESP.- El Tribunal Supremo de España mandó a juicio a 25 de los 28 investigados por el proceso independentista de Cataluña de 2017 y encarceló a varios de ellos, incluido el candidato a presidente regional, Jordi Turull, y pidió la detención de los huidos, entre ellos el expresidente catalán Carles Puigdemont. A otra docena la procesó por el cargo de desobediencia, por lo que no podrán ocupar cargos públicos.
Las sentencias causaron movilizaciones en toda Cataluña, causando disturbios con heridos leves en Barcelona.
El ordenamiento penal español prevé una pena de 15 a 30 años de prisión por el delito de rebelión.
Según el auto judicial, los procesados por rebelión sabían que “el fanatismo violento de muchos de sus seguidores” podía desatarse por sus acciones.
Además, el magistrado Pablo Llarena sospecha que la estrategia de acción de los independentistas catalanes se encuentra “latente y pendiente de reanudación” en cuanto tengan ocasión.
Miles de personas salieron a la calle convocados por organizaciones independentistas en varias localidades de Cataluña para protestar contra los encarcelamientos.
Pese a las advertencias constantes del Tribunal Constitucional español, el gobierno independentista catalán convocó un referéndum de “autodeterminación” para el 1 de octubre de 2017, y el Parlamento regional de entonces, de mayoría separatista, aprobó el día 27 del mismo mes una declaración a favor de la secesión unilateral,
Entonces, el Gobierno español, amparado en la Constitución, destituyó a Puigdemont y al gobierno catalán y convocó elecciones autonómicas, en las que los partidos independentistas sumaron mayoría absoluta de diputados.
Sin embargo, no ha podido elegirse un nuevo presidente catalán por la situación jurídica de los candidatos propuestos: Puigdemont, Jordi Sánchez y Turull.